Luego de enfrentar discriminación y censura, Pablo Ruiz llegó a Querétaro totalmente renovado y con una fortaleza que lo hace ser una persona diferente.
Así lo comentó previo al show que ofreció en el Club Latino de la capital del estado que se abarrotó con la presencia de sus admiradoras.
Fans de distintas generaciones que ahora siguen a Pablo Ruiz, disfrutaron de la presencia y música en este espectáculo, que forma parte de su gira “Rayo de luz” con la que está celebrando 40 años de carrera.
“Estoy feliz de poder estar sobre un escenario y de visitar Querétaro y compartir con los fans que me siguen los temas que han convertido en éxito”, comentó Pablo Maximiliano Miguel Coronel Vidoz, que es su nombre de pila.
Temas como “Oh mamá”, “Orgullosa nena”, “Cachetada”, “Espejos azules” y “El rincón prohibido” son algunos de los que sonaron durante su concierto.
En la charla previa recordó que ha pasado por momentos muy difíciles, por lo que tuvo que acudir a terapia psicológica y psiquiátrica que ayudó a salir adelante.
“Recomiendo ampliamente que quién lo necesite tome terapias, que ayuda a ver las cosas de una forma diferente y superarse”.
“También me ayudó mucho hacer meditaciones, lo cual sigo realizando todos los días”.
Platicó que fue criticado por sus preferencias sexuales, lo cual afectó su carrera artística.
Incluso, cuando estaba en uno de los momentos más exitosos, fue acosado por el ejecutivo de una compañía disquera, y ante la negativa provocó que su carrera se detuviera.
Pablo ha dicho que está situación provocó que buscará una salida que consideró fácil, que pensó eran las drogas y el alcohol.
“Gracias a Dios nunca tuve una sobredosis porque siempre tuve ese contacto con mi espíritu y mi alma”.
Estás complicaciones con la disquera provocaron complicaciones contractuales, lo que causó que la pausa en su carrera artística fuera más extensa.
“Tenía que vivir de prestado. Me fui a Miami porque tuve peleas con las personas que me obstaculizaban. Sacaban todo el dinero posible, no promocionaban el material y todas las ganancias eran para ellos, a mí no me daban nada”, reveló.
Para sobrevivir comenzó a trabajar como paseador de perros, bañaba las mascotas de sus amigos y limpiaba casas, “así podía ganar un poco de dinero, aunque daba pena, ahora lo puedo decir orgulloso”.
Después de un sueño que tuvo con su papá, quién falleció cuando el cantante era muy pequeño, es que supo que era el momento para regresar a México para retomar su carrera, ya con una mentalidad diferente.
Dejó las adicciones y se involucró en la meditación y en su bienestar emocional.
“A pesar de todo lo que pueda pasar y lo que haya que enfrentar, todo se puede superar para tener una mejor vida. Todo está en nosotros mismos y a mí me ha ayudado mucho el trabajo mental y las meditaciones”, comenta.
Confiesa que a pesar de ser argentino, México se ha convertido en un lugar muy importante en su vida, tanto profesional como personal.
“Mi primera relación homosexual fue aquí en México, aquí besé a Ricky Martin. El público de México siempre me ha entregado su cariño y ha cantado mis temas”, comenta Pablo Ruiz.
“México impulsó mi carrera y ahora es México quien me recibe, por lo que entusiasma mucho presentarme en distintos lugares, como Querétaro”.
Al hablar de su encuentro con Ricky Martin platica que se dio en México, cuando el puertorriqueño grababa la telenovela “Alcanzar una estrella II”.
“Yo venía de hacer un tour en México en los años 90, recién había terminado la gira cuando él (Ricky Martin) se llevó a mis bailarinas y me enojé, entonces le dije a mis bailarinas: ‘ahora me lo presentan’”.
En la reunión comenzaron a jugar “Verdad o reto” y ahí fue cuando se besaron, que ante la presencia de otras personas, rápidamente se supo.
Confiesa que está preparando un concierto especial para presentarse en la Sala Roberto Cantoral, en la Ciudad de México. “Además de que ya trabajo en nuevas canciones”, confiesa.
Además platica que su deseo es platicar sus vivencias en un libro autobiográfico. “Esto me lo han pedido mis fans y además me servirá como una catarsis”, finaliza.
