Por una #SociedadHorizontal
Pasada la elección intermedia, el presidente López Obrador ha planteado la necesidad de realizar cambios en materia electoral. La sugerencia no extraña. Como cada sexenio, surgen planteamientos y cambios coyunturales. A lo largo de los últimos 20 años, la clase política ha parchado nuestro esquema electoral, sin que ello haya significado respuestas de fondo. Administración tras administración, la Reforma del Estado ha quedado disminuida a sucesivas e incompletas reformas electorales.
En esta ocasión, se ha filtrado un documento que forma parte de la iniciativa que habrá de presentar Ricardo Monreal, coordinador de los Senadores morenistas. Aún cuando el mayor debate se ha dado en torno al cese de los 11 actuales consejeros del INE y los 7 magistrados del Tribunal Electoral, hay propuestas que modificarían de manera importante el actual funcionamiento de las instancias electorales y la propia representación política.
Un claro ejemplo es la idea de eliminar y reducir el número de legisladores proporcionales. La iniciativa propondría que desaparezcan los 32 senadores que son electos de forma plurinominal. De esta forma quedarían solo 96 escaños, 64 electos por el principio de mayoría relativa (2 senadores por cada entidad federativa) y 32 por el principio de primera minoría, los integrantes de la fórmula que obtuvo el segundo lugar. Con respecto a la Cámara de Diputados, se propone reducir el número de 200 a 100 diputados plurinominales, con lo cual ésta quedaría compuesta por 400 miembros.
Cabe señalar que desde su origen, la presencia de legisladores de representación proporcional ha tenido como objetivo garantizar una mayor pluralidad en el debate público y la consecuente búsqueda de acuerdos que represente mejor a una sociedad que como la mexicana es muy compleja. Este debate requiere análisis y una revisión cuidadosa sobre lo que pretende alcanzarse. La justificación de generar ahorros es totalmente insuficiente.
Otro planteamiento que requiere una mejor revisión es la absorción de las facultades de 32 Organismos Públicos Locales Electorales (Oples) por parte del INE. El diseño original de lo que fue el Instituto Federal Electoral, quedaría totalmente modificado al convertir al órgano electoral en una entidad centralizada. La pregunta sería ¿Es congruente que en una República Federal, los estados no tengan incidencia en uno de los procesos políticos más relevantes que es la expresión del voto?
Por último, uno de los “talones de aquiles” de nuestro actual modelo, ha sido la fiscalización a los partidos. El uso del dinero y la supervisión del mismo sigue siendo una de las áreas mas deficientes. Regular las enormes cantidades de recursos que fluyen en las campañas es indispensable para garantizar una verdadera equidad. La iniciativa propondría la “autofiscalización” por parte de los partidos políticos en lugar de que sea el órgano electoral. Esta discusión no puede ser al vapor.
AMLO ha planteado “depurar” a los organismos electorales, “por estar al servicio de intereses ajenos a la democracia”. Es evidente que este tema generará una gran polarización. La idea de quitar a los actuales consejeros y ministros, seguramente se convertirá en el gran tema que generará posiciones a favor y en contra. Entre otras cosas, la coalición PRI, PAN, PRD enfrentará el reto de mantenerse unida. Mi pronósitico es que se romperá.
La #SociedadHorizontal deberá participar en esta discusión. Es importante que no caiga en la trampa de solo analizar si deben o no permanecer los actuales funcionarios. La propuesta contiene temas relevantes que requieren un entendimiento, reflexión y discusión profundas.
No obstante, la reflexión debe ir mucho más allá. Desde hace muchos años, el país ha dejado pendiente una Reforma del Estado que posibilite la modernización de nuestro marco institucional en beneficio de una mejor democracia, una vida republicana plena y un federalismo moderno. Adicionalmente, las nuevas tecnologías han abierto un universo de oportunidades en materia de comunicación y organización que deberíamos aprovechar. Evitemos quedarnos en la simple coyuntura electoral y empujemos por lo que realmente requiere el país.