Sacramento Arias Montoya, vicario episcopal para la Catedral y Rector recordó durante la celebración eucarística la petición del obispo Mons. Fidencio López Plaza de seguir orando por todos aquellos que han desaparecido a causa de la violencia en nuestro país, así como dar consuelo a las familias mexicanas que atraviesan por esta situación.
En este sentido, invitó a poner la mirada en Jesús para aprender de el para ver y compadecerse de los demás, y de este modo, actuar como Dios quiere que lo hagan, sin ser indiferentes. A través de la mediación humana, explicó que se puede llegar a descubrir la presencia de Dios y así, erradicar la violencia que hoy es tan presente en todo el mundo.
A propósito del Día del padre, refirió que la misión que tiene el papá en la tierra es hacer presente el amor de Dios, que es cercano, y que no abandona a sus hijos, siendo así un “espejo de Dios”.
“Hagan lo que él está haciendo. Vayan a perdonar, a liberar, a curar, a hacer presente el reino de los cielos. Esa misión y ese vayan es para todos nosotros, porque ahora nosotros somos la iglesia y somos enviados”.
Es gracias a lo anterior que existe el hombre, porque de acuerdo con Arias Montoya, el hombre llegó al mundo a ayudar en todas sus necesidades, haciendo presente los valores del reino viviendo auténticamente como cristiano, con paz, justicia, vida, santidad y amor.
“Hoy estamos pidiendo por todos nuestros desaparecidos, para intensificar la oración por la paz (…) para construir el reino de Dios”. Concluyó recordando la urgencia y necesidad de que existan pastores que guíen al hombre por las vocaciones a la vida consagrada de Cristianos así como ser agentes de paz, mediación y salvación para un mejor ambiente en la sociedad y no ser indiferentes con lo que pasa.