Lo reconocen por su obra “La herida del territorio”; en 2017 ya había ganado por “Neighborhood”
Por segunda ocasión, Imanol Martínez ganó el Premio Nacional de Dramaturgía “Manuel Herrera”. Ahora lo hizo con su obra “La herida del territorio”; en el 2017 lo obtuvo por su trabajo “Neighborhood”.
El jurado, compuesto por Verónica Jujeiro Ortega, Juan Carlos Martínez Franco y Antonio Ituriel Hernández Ruiz, lo otorgó “por ser una obra con sólida tesis temática, una estructura bien construida e interesante que remite al absurdo del conflicto económico actual, enfatizando una mirada global, que retrata ampliamente los avatares del capitalismo y su impacto en el ciudadano promedio”.
PLAZA DE ARMAS, el periódico de Querétaro, entrevistó al autor queretano sobre el proceso de creación de su obra y su reciente distinción.
“Es una obra que escribí durante los últimos meses gracias a que estaba en el programa de jóvenes creadores del Fonca, precisamente en el área de dramaturgia. Tuve de tutores a dos dramaturgos, quienes sí diría que admiro mucho, Pilo Galindo y Amaranta Leyva, y bueno, es una obra que yo tenía en mente desde hace tiempo y que surgió gracias a una nota de periódico.
En 2018, poco antes de las revueltas de los chalecos amarillos estaban sucediendo unas protestas muy especificas en un barrio que se llama Saint Barthelemy, Francia, donde un grupo de trabajadores estaban protestando para que no cerraran un McDonalds. “La imagen era muy fuerte, muy paradígica de cómo alguien podía defender un símbolo tan fuerte del capitalismo, y entonces eso me dio pie a preguntar qué sucedía, me di cuenta de que este grupo de trabajadores eran orillados a que McDonalds fuera casi la única de sus posibilidades laborales además era el único lugar de encuentro para los jóvenes que hablaba de una falta de espacio público y estos temas que me interesaban mucho”.
En la nota hacían referencia a un hecho de 20 años antes en el que el escenario era todo lo contrario, también en Millau, Francia, en el que José Bové fue de estas figuras de la lucha antiglobalización. Protestaba porque no se abriera un McDonalds, una propuesta simbólica por unas cuestiones de mercado. “Pero entonces lo que yo hice fueconvivir esos dos hecho basados obviamente por la ficción hacerlos convivir como si fueran protagonizados por esa misma comunidad la cual se enfrenta a dos situaciones en las que tienen que luchar contra un lugar como el McDonals y en contra del mismo, y luego para conservarlo, entonces eso me parecía una imagen muy paradójica”.
Imanol Martínez agrega que: “al mismo tiempo yo tenía muchas ganas desde antes, hay una obra de teatro de un dramaturgo inglés de los años 30’s que se llama David Presley, que escribió una obra de teatro que se llama ‘La vida del tiempo’ de ahí la referencia del título de la mía, a la que básicamente entre un acto y otro transcurren 20 años, entonces me interesaba mucho ver eso, poner una obra en dos actos que midiera la distancia. Pensaba en estos meses que vi “Dark”, “Patria” y ser así que precisamente operan de ese modo, entonces pues quería hacer algo mas o menos así en teatro”.
Por otra parte, la obra tiene un pequeño texto que funciona para ser representada en el entreacto y que ese habla, está emparentado temáticamente porque habla de las ruinas urbanas de un Blockbuster, y “de cómo nos aferramos a la nostalgia a imitar ciertas prácticas que ya no existen como un viernes ir a rentar películas”.
Sobre el premio, imanol Martínez finaliza diciendo que “tuve la fortuna que empataba muy bien que terminé de escribir la obra y que este premio que suele salir en el primer semestre del año se recorrió en esta ocasión por la pandemia y eso me permitió meterla a concursar y resultó ganadora”.