La actriz Silvia Pinal falleció a lo 93 años después de diversos problemas respiratorios que incluso la llevaron a estar internada en varias ocasiones.
La Diva del Cine Mexicano permaneció internada los últimos días debido a que presentó complicaciones de salud. Sus pulmones colapsaron y ya tenía insuficiencia respiratoria por lo que estuvo inconsciente, siempre acompañada de su hija Sylvia y de su asistente personal por muchos años: Efigenia, de Luis Enrique Guzmán y de su nieta Stephanie Salas, acompañada de su pareja, el actor Humberto Zurita. Alejandra Guzmán, hija de la Diva, estuvo pendiente aunque no podía estar mucho tiempo con ella debido a problemas de salud que presentó.
Finalmente la actriz perdió la vida este jueves 28 a las 17:50 horas.
Silvia Pinal había estado hospitalizada hace más de un año por complicaciones derivadas de COVID y posteriormente volvió a ingresar al nosocomio para atenderse de una llaga en el cuerpo que se le hizo por estar mucho tiempo acostada.
En días pasados tuvo una infección en las vías urinarias e insuficiencia respiratoria, que se le complicó con baja en la presión arterial y arritmia cardíaca y posteriormente le dieron un tratamiento por una fuerte infección.
Silvia Pinal fue considerada la Diva de México y una de las grandes figuras de la Época de Oro del Cine Mexicano, del teatro y de la televisión.
Fue madre de cuatro hijos: Sylvia Pasquel, Viridiana Alatriste (quien falleció de forma trágica trás un accidente automovilístico), Alejandra Guzmán y Luis Enrique Guzmán.
EXITOSA CARRERA
Silvia Pinal, quien nació el 16 de septiembre de 1931, debutó con un papel pequeño en 1949 en la película “El pecado de Laura”. Destacó en la llamada Época de Oro del Cine Mexicano con filmes como “El rey del barrio”, “Un rincón cerca del cielo”, “ Un extraño en la escalera” y “Locura pasional”.
El director Luis Buñuel fue un personaje importante en su carrera. Además de que realizaron tres cintas se hicieron compadres. Con la película “Viridiana” lograron el máximo reconocimiento en el Festival de Cannes. También realizaron juntos “El ángel exterminador” y “ Simón del desierto”.
El nombre de Silvia Pinal está ligado también a la pantalla chica al ser parte de los inicios de la televisión nacional.
Domingo Soler fue quien la invitó a participar por primera vez en la televisión en una emisión de ayuda social.
Luego participó en los teleteatros de la mano de Manolo Fàbregas. Posteriormente incursionó en las telecomedias, que se ensayaban por la mañana y se transmitían por la tarde. Después recibió la oportunidad de encabezar su propio programa, “ Fiesta musical Ford”.
A finales de los años 60 encabezó el programa de variedades “Los especiales de Silvia”, a donde invitó al rockero del momento: Enrique Guzmán. Esto dio paso, a qué ya casada con el cantante, propusiera hacer el programa “Silvia y Enrique”.
Sin embargo, uno de sus programas más icónicos fue “Mujer, casos de la vida real” en el que realizaba una labor social al tratar temas reales y buscar soluciones, tomados de muchísimas cartas que enviaban los televidentes. La emisión tuvo gran impacto entre los televidentes y logró altísimos niveles de audiencia, por lo que se mantuvo al aire por 23 años.
A la par participó en destacadas telenovelas como la histórica “ Los caudillos”, además de “Quién”, “Mañana es primavera”, “Eclipse”, “El privilegio de amar”, “Carita de ángel”, “Fuego en la sangre”, “Soy tu dueña”, “Una familia con suerte”, “Mujeres asesinas”, “Mi marido tiene familia” y “Una familia de diez”, entre muchas otras.
La llamada Diva del espectáculo fue parte importante de la historia del teatro en México.
Las puestas en escena musicales llegaron a México gracias a Pinal, quien realizó importantes obras como “Mame (con una temporada de varios años), “Ring, ring llama al amor”, “Gipsy”, “Que tal, Dolly”, y “La jaula de las locas”.
Su pasión por el teatro y con la idea de abrir espacios para más obras, inauguró el Teatro Silvia Pinal, en la colonia Roma de la Ciudad de México. Por cuestiones económicas y de su socia, tuvo que cerrar este recinto para al poco tiempo abrir el Nuevo Teatro Silvia Pinal, en la calle de Versalles, lugar que continúa en activo.
La última vez que Pinal apareció sobre un escenario como actriz fue en 2022, cuando el productor Iván Cochegrús realizó la obra “Caperucita, Qué onda con tu abuelita!” en la que interpretaba el personaje central. Sin embargo, después de un fin de semana de presentaciones debió cancelar su participación debido a que tuvo una baja de presión.
Además de haber logrado la Palma de Oro en el Festival de Cannes, Silvia Pinal fue reconocida con el Ariel de Oro y fue nominada al Ariel en cuatro ocasiones. Además fue miembro de la Academia de Cine de Estados Unidos.
SU VIDA AMOROSA
Sin lugar a dudas Silvia Pinal fue una de las mujeres más bellas de la época en el espectáculo, por lo que tuvo pretendientes a su alrededor.
La inteligencia, experiencia y personalidad del actor, productor y director Rafael Banquells la cautivaron. Cuando Silvia tenía 17 años y Rafael 35 se casaron en una ceremonia en la que el padrino fue Mario Moreno Cantinflas.
La actriz comentó que decidió aceptar casarse en buena parte para salirse de la disciplina que había en su casa. Estuvo casada de 1947 a 1952 con Banquells, con quien tuvo a su primera hija Sylvia Pasquel.
Después tuvo un romance con el actor Arturo de Córdova, a quien conoció mientras filmaba “Un extraño en la escalera”.
Pinal después inició una relación amorosa con el empresario Emilio Azcárraga Milmo, que duró alrededor de cuatro años, para luego convertirse en muy buenos amigos.
Luego se involucró con el empresario mueblero Gustavo Alatriste, quien fue uno de los grandes Amores de su vida.
Se enamoraron y dijo que fue una de las etapas más felices de su vida.
Para darle gusto a su mujer, Alatriste incursionó en la producción, así realizó las tres cintas que Silvia hizo con el director Luis Buñuel: “Viridiana”, “El Ángel Exterminador” y “Simón del desierto”. Alatriste y Pinal estuvieron casados de 1961 a 1967 y tuvieron a su hija Viridiana.
Posteriormente mantuvo un romance con el hotelero Nick Hilton, quien se había separado de Elizabeth Taylor y que era tío de París Hilton.
Luego llegó a su vida Enrique Guzmán, diez años más joven que ella. Procrearon a dos hijos: Alejandra y Luis Enrique. Comenzaron a hacer televisión juntos, aunque su relación estuvo llena de altas y bajas, por lo que después se supo que el rockero ejerció violencia doméstica en contra de ella.
El empresario Fernando Frade fue el siguiente en la lista, pero esta relación le causó un rompimiento con su hija Sylvia Pasquel, ya que él mantenía un romance con ella.
Pasquel y Frade sufrieron una tragedia cuando su pequeña hija se ahogó en la alberca de su casa. La niña, curiosamente también se llamaba Viridiana.
Su cuarto matrimonio fue con el político Tulio Hernández, quien fuera gobernador de Tlaxcala. Ella se convirtió en Primera Dama del estado y en presidenta del DIF de Tlaxcala.
ALREDEDOR DE LA POLÉMICA
La vida de Silvia Pinal no estuvo alejada de los escándalos. En 1999 fue acusada de un supuesto fraude mientras era presidenta del consejo directivo de la Asociación Nacional de Productores de Teatro, por lo que tuvo que salir del país e irse a Miami por once meses, a casa de su hija Alejandra Guzmán, mientras se aclaraban los hechos. Una vez que se demostró su inocencia regresó a México para continuar con sus actividades de forma normal.
Recientemente su nombre ha estado envuelto en dimes y diretes luego de las declaraciones de su nieta Frida Sofía en contra de Enrique Guzmán por abusos y tocamientos indebidos cuando era menor de edad, lo que desató un escándalo familiar.
También por lo dicho por su nuera Mayela Laguna de que junto con Luis Enrique, hijo de la Diva, saquearon de su casa una gran cantidad de joyas.
Está relación finalmente terminó luego de que se comprobó que el pequeño Apolo, a quien doña Silvia consideraba su nieto, no era hijo de Luis Enrique, hecho que la afectó emocionalmente.
Un escándalo que afectó su vida personal y familiar fue debido a la relación sentimental que tuvo con el empresario Fernando Frade, mucho más joven que ella, y quién había sido pareja de su hija Sylvia Pasquel. Eso provocó un distanciamiento por una larga temporada entre madre e hija.
La primera actriz nacida en Guaymas, Sonora, también se vio afectada por los padecimientos de su hija Alejandra Guzmán. La rockera estuvo internada en varias ocasiones en centros de rehabilitación por el consumo de estupefacientes, además de que su vida estuvo en peligro luego de que se sometió a un tratamiento estético en el que le inyectaron polímeros en los glúteos. Eso ha provocado que se haya sometido a más de 40 operaciones.
MOSTRÓ SU DESNUDEZ
Luego de su separación de Enrique Guzmán, Silvia Pinal encabezó la cinta “Divinas palabras”, de Juan Ibáñez, en dónde hizo un desnudo total en una escena dentro de una jaula.
A raíz de esto recibió la oferta de la revista “Review” para tomarse unas fotografías sin ropa.
“Acepté porque me sentía divina. La verdad no me costó trabajo”, comentó la actriz, quien en ese momento tenía 47 años.
La sesión de fotografías se realizó en su casa, con un concepto muy sensual pero sin aparecer completamente desnuda.
Trece años antes. En la película “Simón del desierto” de Luis Buñuel, la actriz había aparecido con el pecho descubierto en unas escenas.
SU PASO POR LA POLÍTICA
Luego de la muerte de su hija Viridiana, ocurrida en 1982, y trás haberse casado con Tulio Hernández, gobernador de Tlaxcala, la actriz se involucró con una faceta que no había explotado: la política.
Su incursión fue al ser presidenta estatal del Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) por lo que comenzó a involucrarse en la organización de diversas actividades culturales. Al ser la esposa del gobernador se fue interesando en la vida política, lo que dijo le fascinó.
Al terminar su actividad política en Tlaxcala inició una campaña para la presidencia de la Asociación Nacional de Intérpretes. Al lograr el cargo se involucró en la tarea de defender los derechos y mejorar las condiciones de los intérpretes, lo mismo en cuanto a los discos como en películas, teatro, radio y programas televisivos.
Después recibió la invitación de Marcelo Ebrard para que se lanzará como diputada del Partido Revolucionario Institucional (PRI) para el distrito XXVII (Coyoacán, Tlalpan). Platicaba que ese tiempo marcó una época con mucha carga de trabajo, porque tenía que dividirse entre la ANDI, la Cámara de Diputados, su carrera de actriz y su vida familiar. También fue presidenta de la Comisión de Radio Televisión y Cinematografía.
Una vez que concluyó su labor en la ANDI creó la Fundación Rafael Banquells con la cual se ha ayudado a los actores adultos mayores y promovido los estudios superiores y becas.
Fue parte de las personas que crearon la Asamblea Legislativa del Distrito Federal
Posteriormente estuvo al frente de la Secretaría General de la ANDA (Asociación Nacional de Actores).