- Aprueban créditos a Mauricio Kuri y Mauricio Vila
- Vino Manuel Velasco, la “corcholata” del PVEM
- La Viejoteca: Porfirio Muñoz Ledo y Querétaro
- Loyola se registra para la Presidencia de México
Dos Mauricios.
Dos Morenas.
Dos varas.
A propósito de la “expulsión” decretada por la presidenta estatal del Movimiento Regeneración Nacional, Rufina Benitez Estrada, en contra de cuatro de sus cinco diputados locales por votar a favor del crédito solicitado por el gobierno estatal, este armero advierte no solamente la falta de un previo procedimiento sancionador sino dos criterios para medir la actuación de los legisladores de ese partido en circunstancias similares, pero en distintos estados: Querétaro y Yucatán. Aquí Mauricio Kuri pidió y le aprobaron 3,300 millones para energía y transportes. Allá, Mauricio Vila, pidió y le aprobaron 3,000 millones para una obra portuaria en Progreso.
Aquí Morena pretende expulsar a sus diputados. Allá, no.
Déjeme contarle.
El jueves pasado la LX Legislatura de Querétaro aprobó por unanimidad la contratación de un crédito por 3,300 millones de pesos para atender dos graves problemas sociales: el del suministro eléctrico y el del transporte colectivo. Ese mismo día el gobernador Mauricio Kuri agradeció el respaldo de todas las fuerzas políticas que, más allá de partidos y colores, decidieron “por el bienestar de nuestras hijas e hijos”.
Pero hete aquí que solo unas horas después, el viernes, la dirigencia estatal de Morena recriminó la votación de sus representantes populares en un boletín titulado “Expulsión de diputados que traicionan al pueblo” por haber violado espíritu, principios y programa del movimiento, en lo que califica como “hechos vergonzosos”.
De allá para acá ha habido muchas reacciones, entre ellas la del dirigente del PVEM, diputado Ricardo Astutillo, digo Astudillo, que ofreció a sus compañeros de Cámara recibirlos y armar la segunda bancada y la de Juan José Jiménez denunciando que desde el comité encabezado por Rufina Benítez Estrada se pretende dividir al partido.
Jiménez, también suplente de Gilberto Herrera en el Senado, es uno de los cuatro presuntos traidores, junto con Christian Orihuela Gómez, Yasmín Abellán Hernández y Armando Sinecio Leyva. La única que se salva de la quema es Andrea Tovar Saavedra que “se ausentó” para no votar. Evidentemente, para que proceda la expulsión, tendrá que haber un procedimiento sancionador, pues la garantía de audiencia, ser oído y vencido en juicio, son principios constitucionales que en materia electoral se preservan y están por encima de los documentos partidistas.
Y lo más curioso es que el Movimiento Regeneración Nacional tenga dos varas para medir a sus diputados de Querétaro y Yucatán que les aprobaron créditos similares a los gobernadores panistas Mauricio Kuri y Mauricio Vila, aquí el jueves 6 de julio, allá el 20 de mayo anterior.
La diferencia, dicen, es el huracán.
¿El huracán?
Sí, el Huracán Gilberto.
¡Ah, raza!
-LA VIEJOTECA-
Porfirio y Querétaro.
A dos semanas de cumplir los 90 años, murió ayer Porfirio Muñoz Ledo, personaje indispensable de la historia política del país. El expresidente nacional del PRI, formó parte de la corriente democrática que dio origen al PRD y más tarde a Morena. Fue secretario de Educación Pública y del Trabajo, además de embajador de México ante la ONU.
Muchas veces estuvo en Querétaro, pero se recuerda especialmente su discurso en el inicio de la campaña presidencial José López Portillo, pronunciado en octubre de 1975 en el Cerro de las Campanas.
En ese mismo acto habló a nombre de los jóvenes el entonces diputado local Mariano Palacios Alcocer, cuya participación impresionó tanto al candidato que lo integró a su equipo de oradores, hasta que a media campaña lo envió de regreso, desde la península yucateca, como candidato a la presidencia municipal de Querétaro, siendo precisamente Porfirio Muñoz Ledo, presidente del comité nacional del PRI, quien le comunicó la decisión.
El hecho cayó de sorpresa aquí, porque el gobernador Antonio Calzada Urquiza (qepd) tenía decidido postular a Fernando Ortiz Arana para ese cargo y no era común que un presidente de la República decidiera alcaldías, normalmente reservadas -como hasta ahora- a la opinión del gobernador, sea cual sea el partido gobernante. Aquí la circunstancia era que López Portillo quería que Mariano Palacios fuera diputado federal, pero la ley vigente entonces impedía serlo a los diputados locales.
Y ahí comenzó la competencia entre los dos políticos más destacados de Querétaro en el ámbito nacional: Mariano y Fernando. Ambos, miembros de la Nueva Generación promovida por el gobernador Antonio Calzada Urquiza (1973-1979) fueron presidentes nacionales del PRI. El primero también gobernador, el segundo dos veces candidato a serlo y hasta se le mencionó como presidenciable tras el asesinato de Colosio.
Pero esa es otra historia.
O mejor dicho, varias historias.
-OÍDO EN EL 1810-
Sospechosismo.
Que con la denuncia del comité estatal de Morena en contra de los cuatro diputados que votaron el crédito para el gobierno de Mauricio Kuri, lo que se busca es distinguir a la quinta legisladora: Andrea Tovar Saavedra, cercánisima a Celia Maya García, para las candidaturas federales.
Somos nada.
-¡PREEEPAREN!-
¡Paren las máquinas!
Como se lo adelantamos el viernes en La Fuente de El Marqués, el diputado federal panista Ignacio Loyola Vera se registró ayer domingo como aspirante a la candidatura presidencial de la alianza opositora, con varias proclamas a través de las redes: ¡Sí se puede!, Levemos anclas, Despleguemos velas, Esperamos viento favorable, Necesitamos tripulación, Bienvenidos a bordo.
Nacho, que en 1997 dio el campanazo al ganarle la gubernatura al priista Fernando Ortiz Arana, había expresado su aspiración de buscar la senaduría, pero -¡oh, sorpresa!- ahora quiere ir por la grande, con el antecedente de otro queretano, Ricardo Anaya Cortés, que perdió en 2018 ante Andrés Manuel López Obrador, además de la participación de Diego Fernández de Cevallos en 1994 frente a Luis Donaldo Colosio y Ernesto Zedillo, pero esas son otras historias.
Hoy, sin menospreciar al ingeniero ni negarle méritos, todo hace ver a la disruptiva Xóchitl Gálvez como la carta de PAN, PRI y PRD frente a la corcholata de Morena.
¿Cuál es, entonces, el cálculo de Ignacio Loyola?
Muy probablemente, tirarle arriba para pegar abajo. O sea, llamar la atención de las cúpulas con el propósito de ser tomado en cuenta como candidato al Senado, en donde también la tiene sumamente difícil, a menos de que vaya en la lista de representación proporcional.
Y es que la lucha por ser postulados a la cámara alta está muy reñida entre el secretario de Desarrollo Social del Estado, Agustín Dorantes Lámbarri y los presidentes municipales de Querétaro, Corregidora y El Marqués: Luis Nava Guerrero, Roberto Sosa Pichardo y Enrique Vega Carriles, respectivamente.
No nos vamos a aburrir.
-¡AAAPUNTEN!-
Verde.
El ex gobernador de Chiapas Manuel Velasco Coello estuvo aquí el viernes en gira de promoción para obtener la coordinación de la defensa del proyecto de la Cuarta Transformación, o sea, la candidatura presidencial. Dijo que está creciendo en las encuestas y no declinará por ninguna de las corcholatas. Además planteó crear una fiscalía especializada en la atención de mujeres y un cluster de la industria aeroespacial. Ambas cosas, si no me equivoco, ya existen. Lo acompañó el dirigente estatal del PVEM, Ricardo Astudillo Suárez.
Doy fe.
-¡FUEGO!
Antecedente.
La dirigencia anterior de Morena, con el apoyo del comité nacional presidido por Mario Delgado, “expulsó” en el pasado proceso al entonces presidente de su consejo, Ángel Balderas Puga, quien les ganó el juicio y hoy es el principal consejero de Rufina Benitez.
¡Porca miseria!