En febrero, los subsidios y transferencias del Gobierno federal ascendieron a 266 mil 218 millones de pesos, un incremento anual real de 227 por ciento, el mayor para un mismo mes en lo que va del sexenio, de acuerdo con datos de la Secretaría de Hacienda.
Con el aumento reportado en dicho mes también se logró que en el primer bimestre del año se registrará un alza de 142.6 por ciento con respecto al mismo periodo del año pasado.
Además, en febrero pasado, los subsidios y transferencias representaron 31.7 por ciento del gasto total del sector público, el cual se colocó en 839 mil 657 millones de pesos, añaden las cifras de Hacienda.
Entre los subsidios existen esquemas de pensiones del IMSS, aportaciones a la CFE, pensiones de adultos mayores, entre otros.
Al interior de este rubro, el gasto en protección social ascendió a 129 mil 450 millones de pesos, un aumento de 453.3 por ciento en relación con igual lapso de 2023.
Este gasto incluye los recursos que se destinan a programas prioritarios del Gobierno federal, como son becas para estudiantes y la Pensión para el Bienestar de Adultos Mayores, entre otros.
De igual manera, los recursos por subsidios y transferencias destinados a educación y salud también mostraron incrementos de 151.1 y 101.1 por ciento, en ese orden, arroja la información de la dependencia federal.
Con el monto registrado en febrero pasado, los subsidios y transferencias siguen superando a la inversión física del sector público (que es toda aquella que se enfoca a construir, conservar o adquirir bienes de capital necesaria para obra pública, tanto directa como indirecta), la cual es ese mismo mes ascendió a 65 mil 382 millones de pesos.
Esto se registró a pesar de que la inversión física tiene un efecto positivo en el desarrollo del País, debido a que crea infraestructura que hace a la economía más competitiva y productiva.
En análisis anteriores, México Evalúa ha mencionado que el gasto del sector público se ha dado de manera selectiva con fines políticos.
“El mayor gasto en subsidios que en inversión implica que se construyan menos capacidades de desarrollo para el futuro”, ha manifestado la organización.
En contraste, los recursos se han enfocado en programas con mayores beneficios políticos para el Gobierno federal, agrega.
Además, por la composición de los subsidios, no es un hecho que se esté dando prioridad a las urgencias, ha alertado en diversas ocasiones el organismo.