Xóchitl Gálvez, ex candidata presidencial, acusó a Marko Cortés de gritarle por felicitar a Claudia Sheinbaum tras su triunfo, la noche del 2 de junio.
En entrevista con REFORMA, la senadora platicó que cuando escuchó los resultados del conteo rápido por parte de la presidenta del INE, Guadalupe Taddei, pidió a su coordinador de campaña, Max Cortázar, comunicarse con su adversaria morenista.
“Para mí (escuchar el resultado) es contundente. Sí, entiendo que mucha gente esté enojada conmigo, (pero) el conteo rápido está diseñado de manera matemática para que el resultado sea muy cercano a la realidad. Y en ese momento, para mí, el Conteo Rápido sí tiene una validez técnica absoluta, que no deja ninguna duda.
“Yo le pido a Max que me comunique con Claudia, porque a mí me parece que, en una democracia, es tu deber reconocer tu derrota. O sea, es lo ético, es lo que debe de hacer un demócrata, y yo lo hago. Y lo hago convencida, le marco. Yo no le advierto que no haga pública la llamada. Ella hace pública mi llamada, la ve Marko Cortés y ya sube bastante enojado”, relató.
Gálvez afirmó que la morenista le agradeció la llamada, pues no la esperaba.
La ex aspirante aclaró que no se había pactado con los presidentes de los partidos que ella no podía comunicarse con Sheinbaum.
Denunció que en su discurso, que daría frente a los medios de comunicación, reiteraría la felicitación a la morenista, pero Cortés le exigió quitarla, sólo reconocer los resultados y advertir de la impugnación.
“Yo suelo escribir buena parte de mis discursos, y en ese momento Marko pide que se quite la parte de felicitar, y se arma ahí un debate fuerte. Yo creo que muchos hombres, al igual que el presidente, tienen que aprender a manejar su masculinidad. Muchos hombres creen que gritando, que ofendiendo a las mujeres, resuelven los problemas.
“Yo creo que también los hombres tienen que entender que las mujeres ejercemos la política de una manera distinta, y en mí, lo correcto, era felicitar a Claudia. O sea, no lo dudé. Eso no quiere decir que no señale toda la inequidad de la elección. Levantó (Marko) la voz de manera innecesaria, y fue muy reiterativo”, indicó.
Reveló que después del primer debate presidencial también le gritó.
No espera disculpa de Marko Cortés
A 10 días de la elección, Xóchitl Gálvez no espera que el líder panista se disculpe por estos hechos.
“No, ya no me la ofreció ese día. No me llamó después, porque yo podría entender que estaba enojado esa noche por la derrota. No, no esperaría una disculpa. Es su pensamiento. Yo esperaría que se hubiese disculpado por lo de Coahuila, por ejemplo.
“Él cree que está en lo correcto. Entonces, no, no, no, no lo va a hacer. Yo no me siento indigna porque yo hice todo el esfuerzo para ganarme los corazones de la gente. Tan es así que la gente sentía que podíamos ganar”, añadió.
Aseguró que recorrerá el País para limpiar su imagen y para explicarle a la gente que tenía que reconocer su derrota, pues no es como el Presidente o Morena, que exigen reconocimiento, pero han sido incapaces de aceptar el triunfo en Jalisco o Guanajuato.
“Es de demócratas reconocer el triunfo. Quien entra a la política sabe que se puede ganar o se puede perder. Morena nunca le va a reconocer el triunfo a Lemus. No creo que el Presidente le haya llamado a Libia para felicitarla, porque él no es un demócrata. Él no tiene esa altura, pero yo sí la tengo. No creo haber cometido un error como Marko lo cree. Llamarle a una mujer que ganó la Presidencia, y que además es la primera mujer que gana la Presidencia, pues creo que no estuvo mal. Yo no estoy arrepentida de eso”.
Incluso, dijo, si la virtual Presidenta electa está en la posición de escuchar, podría sentarse a platicar con ella acerca de las principales inquietudes entre los mexicanos, como la reforma al Poder Judicial.
No se anulará elección
Gálvez confirmó que mañana presentará ante el Tribunal Electoral su impugnación para la nulidad de la elección presidencial.
Sin embargo, reconoció, la Sala Superior no la anulará porque existe una “tremenda” diferencia en votos entre ella y Sheinbaum.
Lo mínimo que espera, dijo, es que los magistrados le den una amonestación pública al Presidente de la República por su intromisión en el proceso electoral, pues, insistió, fue una elección de Estado.
La lucha por los recursos
La aspirante presidencial afirmó que los partidos entregaron dinero a su campaña, pero no la dejaron decidir cómo gastar los recursos. Por ejemplo, dijo, en la propaganda.
“Los espectaculares ellos decidieron en dónde y cómo y cuándo. Max no podía decir ‘yo quiero un espectacular en Periférico e Insurgentes’. Ese fue el primer encontronazo que hubo, en el sentido de que nos hubiera gustado tener espectaculares en ubicaciones más estratégicas.
“La campaña de nosotros no tenía recursos para decir ‘manden a hacer 2 millones de playeras’, o queremos esto, o los spots de televisión, pues dependíamos de lo que nos dieran los partidos”, agregó.
Aseguró que las autoridades electorales deberán también cuestionarse su papel, pues no fueron capaces de frenar a López Obrador.