En el otoño de 2019- noviembre- invitado por el IMAC Playas de Rosarito, impartí durante tres semanas, enfrente del mar, el Taller de música popular en la Biblioteca Adolfo López Mateo, Casa central de los libros del Municipio. En el periplo para llegar al Municipio norteño, hice una escala en Ciudad Obregón Sonora, tierra natal del aeda recién fallecida; en una charla con autoras obregonenses, al comentarles de mi destino de viaje, alguien contó que, en Playas de Rosarito, habitaba una poeta originaria de esa ciudad que posiblemente participaría en el centro de trabajo musical. La autora se presentó en el Taller, aportando textos de su autoría musicalizados por Carlos Zúñiga, músico norteamericano con talento bajacaliforniano, los cuales recibieron opiniones favorables de los talleristas, los cuales habían desarrollado en las sesiones de trabajo, un sentido crítico filoso y certero.
Ni humildad ni sumisión/ a pesar de las heridas/ en el vientre de mi madre/ se gestó mi rebeldía. Fragmento, Herencia. Constanza de María Casanova.
En el cierre de actividades se realizó un concierto con obras de los talleristas, la poeta cantó uno de sus textos, recibiendo en recompensa cálidos aplausos de aprobación. Fue el inicio de una amistad sólida, del intercambio de experiencias y lecturas. Coincidimos en la necesidad de nutrir a la canción popular de mejores letras que la enriquecieran, en la urgencia que tienen los autores y compositores de leer como disciplina para mejorar su producto artístico; en una de las charlas con el sol del atardecer rosaritense, me compartió que había publicado tres poemarios: Cabalgando el tiempo; Hoy escribo para ti; Con orgullo y altivez, en su lugar de residencia. Con sorpresa la escuché, señalándole que era una labor que merecía ser difundida. Le señalé que desde 1972, en complicidad con el inolvidable profesor Rubén Vizcaíno participe en la formación del Taller de poesía de la UA de BC, y que desde aquellos ayeres viajo desde el centro de país a realizar talleres en la Península, siempre con resultados promisorios que me llenan de vitalidad y experiencias reconfortantes. Comentamos de amigos comunes que cultivan la poesía y señaló que alguna vez fue junto con poetas californianos a la Sala Manuel M Ponce, a leer sus poemas.
Puedo tocarte/ sin embargo/ se derrama la distancia/ dolorosa espera/ sueño en vano/ recuerdos que se estrellan/ en el cristal de tu espejo mutilado. Fragmento, Dolor Humano. Constanza de María.
La poesía crea deidades, cuenta historias que sólo se pueden expresar en metáforas, imágenes poéticas, palabras que viajan más lejos de las definiciones lingüísticas, sentimientos bélicos, sueños, amores, desamores, retazos de la imaginación, trozos de vida, Constanza dedico su tiempo a cultivarla, compartiendo con los boleros y escuchando la gran canción de la Tía peruana Chabuca Granda. Fue una mujer creativa que se involucró en las luchas sociales de la ciudad donde terminó su historia.
En noviembre de 2021, junto con destacados intérpretes de la zona: Tato Monraz, Maria Rey, Carlos Zuñiga, apoyado por la institución cultural rosaritense, llevé a cabo conferencias y un evento por la conmemoración de los cien años del bolero mexicano, Morenita mía, del violinista regiomontano, Armando Villarreal. Mi salud y la prisa que llevo dentro desde niño, obligaban a que en la madrugada tomara carretera rumbo a casa; en una pausa del Concierto bolerístico, salí a fumar un cigarro, la autora obregonense también fumaba y con una sonrisa acompañó mi adicción tabacomana. Comentó de la grave enfermedad que la aquejaba y que la tenía en las puertas del final; ¿señaló que si llegaba al punto final? podría venir a sus honras fúnebres?, le comenté que el compromiso era mutuo, también la huesuda duerme cerca de mis letras.
Mi lenguaje no es prosaico/ ni estoy sujeta a control/ jamás amo en las penumbras/ teniendo tan bello sol. Fragmento, Herencia Constan
Mi vida transcurre entre talleres, libros, canciones, amistades, las cuatro actividades son mi esencia. Este junio frente al mar, como conocí a la poeta, cumpliendo con el compromiso contraído, participé en el homenaje inmemorian que le rinden, la sociedad rosaritense, las autoridades del H. Ayuntamiento, el IMAC Playas de Rosarito; poetas, compositores, promotores culturales, en el Foro Conrado Acevedo le rindieron merecidamente a sus restos mortales y a su memoria. La recuerdo con extractos de su poesía que compartió conmigo, con los talleristas, con el pueblo. Comparto de manera póstuma fragmentos de sus textos poéticos, consciente de que su tarea honró el arte bajacaliforniano, sonorense, a la vida.
Mi agonía no es de amor/ ni están mis sueños dormidos/ mi canción es de esperanza/ nadie traza mi destino. Fragmento, Herencia, Constanza de María Casanova. DEP