Dentro de 91 días, una de las dos, la doctora Claudia Sheinbaum o la ingeniera Xóchitl Gálvez, será la primera Presidenta de México. Ya verán como lidian con el hecho de que serán evaluadas con más severidad que cualquier varón. “Acuérdense en qué país nacieron”, diría don Jesús Reyes Heroles.
El reto para Xóchitl Gálvez será mantener vivos los desencantos, los desengaños y la indignación de los damnificados por el régimen lopezobradorista y para ello recordar que su discurso tendrá que dirigirse al México real, no al círculo rojo.
Paradójicamente, el desafío es doble para la doctora Sheinbaum, pues, al tiempo que defiende las políticas sexenales y en la plaza pública usa el discursivo recurso de provocar el multitudinario “¡es un honor estar con Obrador!”, tiene que construir su propio liderazgo, ese que no se comparte.
Política de seguridad: ¿continuidad?
El 12 de agosto de 2021 la BBC informó: “Hace cuatro meses que el municipio de Aguililla en Michoacán lo controla el cártel Jalisco Nueva Generación y lo convirtió en el epicentro de la violencia incontrolable en México.
El 1 de marzo de 2024, el Presidente López Obrador confirmó que cuatro soldados murieron en una emboscada con artefactos explosivos mientras patrullaban en Aguililla, Michoacán.
El fin del sexenio está a la vista y desde aquel despacho de 2021 de la BBC nada cambió en Aguililla, salvo que, por la muerte de cuatro soldados, el Presidente hoy acepta que “a peligros como ese se enfrentan todos los días la Sedena, la Marina y Guardia Nacional”. ¿Y?
El síndrome de las placas, marcó al sexenio
Al inicio del actual Gobierno, en este generoso espacio de El Economista, se expresó la esperanza de que no se repitiera el ejemplo de la larguísima curva de aprendizaje que necesitó el lopezobradorismo que funcionara la entrega de placas para vehículos en CDMX.
En 2000, el lopezobradorista Gobierno de CDMX sustituyó con personal políticamente leales a los empleados de SETRAVI. La ineptitud de los nuevos hizo que la entrega de placas para autos recién comprados se retrasara hasta por un año.
Se normalizó a menos de año y medio de que terminara aquel gobierno. Hoy, a seis meses de que termine el sexenio lopezobradorista, uno lamenta que los magros resultados de tantos proyectos del Gobierno de la República hayan sido víctimas de la maldición del síndrome de las placas.
NOTAS EN REMOLINO
A pesar de la advertencia que fue reproche presidencial de que “la Ciudad de México era de avanzada y se ha empanizado”, el Jefe de Gobierno Martí Batres y la Candidata a la Jefatura de Gobierno Clara Brugada, agobiados, sólo atinaron a desmentir la afirmación presidencial… Fuentes palaciegas dejan trascender la recomendación a la Candidata Claudia Sheinbaum de que sería bueno que ratificara en la SHCP a Rogelio Ramírez de la O… Los exégetas del oficialismo lloran como la Zarzamora porque, dicen, que la oposición ha empezado una guerra sucia. Olvidan que la milenaria tradición política dicta que sólo hay dos maneras de presentar a tus adversarios: o como unos corruptos o como unos imbéciles… “Sólo podemos dar una opinión imparcial sobre las cosas que no nos interesan, sin duda por eso mismo las opiniones imparciales carecen de valor”, dijo Oscar