¡A la reja!: Sabino
- Felipe, Peña, Anaya, Pancho y otros en la mira
- Hace un mes le adelantamos lo de los videos
- Envilecieron la política y decidieron por todos
- Meterse a la cocina y quemarse, vieja conseja
A juicio.
Sin mencionarlos, el presidente Andrés Manuel López Obrador, afirmó en La Mañanera de este miércoles que dos ex mandatarios, un ex secretario de Hacienda, cinco senadores y un diputado federal deberán declarar ante el juez sobre el tema de los sobornos denunciado por el ex director de Pemex.
Ni falta hacía que los identificara.
La opinión pública sabe quiénes son y ayer mismo en los principales periódicos nacionales entre ellos Reforma y Milenio (que nadie calificará de sensacionalista) aparecieron sus rostros e imágenes.
Dos ex presidentes: Enrique Peña Nieto y Felipe Calderón Hinojosa.
Un ex secretario de Hacienda: Luis Videgaray, también llamado Luis Vuitton, aunque en su columna de hoy Raymundo Riva Palacio señala que ese apodo podría ser realmente para Luis Vega, el ex secretario de Finanzas del PRI, también cercanísimo a EPN desde el Estado de México.
Cinco ex senadores: Ernesto Cordero Arroyo, Francisco Domínguez Servién, Francisco García Cabeza de Vaca, Salvador Vega Casillas y Jorge Luis Lavalle.
Un diputado: Ricardo Anaya Cortés, ex presidente de la Cámara Federal.
Ellos habrían sido mencionados por Emilio Lozoya Austin como beneficiarios del multimillonario reparto para legislar a modo y apoyar las reformas estructurales, ahora desestructuradas de Enrique Peña Nieto.
Hay videos, como aquí se lo adelante hace más de un mes, el 8 de julio.
“Emilio Lozoya Austin tendría en su poder más de 18 horas de grabaciones de encuentros con empresarios y políticos, celebrados en dos locaciones: sus oficinas en la Torre de Pemex y una casa en la colonia Anzures que utilizaba con centro de reunión y esparcimiento.
“Y lo que realmente le interesa al gobierno de la Cuarta Transformación son específicamente las grabaciones de las reuniones de ELA con los senadores y diputados encargados de votar la reforma energética en diciembre de 2013, impulsada por su jefe, el entonces presidente Enrique Peña Nieto. Sí, exacto, la enmienda que abrió paso a la inversión privada en sectores estratégicos de Pemex.
“En esos cónclaves, según fuentes de la FGR, habrían participado legisladores del PRI, PAN y Verde Ecologista, quienes tras dialogar con Emilio Lozoya, salían muy contentos con su maletín.
“El resultado: 53 senadores del PRI, 35, del PAN, y 7 del Partido Verde aprobaron el dictamen que avaló la inversión privada en los sectores de petróleo, electricidad y gas; y reforma los artículos 15, 27 y 28 de la Constitución. Igual pasó con los diputados federales.
“El asunto es que algunos de estos personajes grabados en su momento por Lozoya Austin en encuentros privadísimos e individuales, ahora son gobernadores de oposición, dirigentes de partido o liderazgos locales. Y ya viene el 2021, año en el que por primera vez, las 32 entidades federativas tendrán una elección local el mismo día. En 15 de ellas se renovará Gobernador, Alcaldes y Congreso; mientras que en 13 estados cambiarán Ayuntamientos y diputados; en dos sólo legisladores locales y en dos más únicamente ediles. Además, ojo, se renovará la Cámara de Diputados federal, tema fundamental en el la hoja de ruta de Morena para sacar adelante su proyecto de nación.
“Los que conocen al presidente López Obrador han comentado que hay dos asuntos fundamentales para él en ese proceso: Uno, mantener la mayoría en San Lázaro y, dos, ganar todas las gubernaturas. Por eso la importancia de la información que le pueda proveer Emilio Lozoya. Y es que no está usted para saberlo, pero yo sí para contárselo: Entre los integrantes de las comisiones de Energía en el Senado y la Cámara de Diputados (estamos hablando de 2012-13, cuando se negoció la reforma), hay destacados políticos locales. Azules, rojos y verdes. Haga memoria”.
Se los dije.
-OÍDO EN EL 1810-
Balcón.
Que más allá de las consecuencias jurídicas de los presuntos implicados en el Caso Lozoya y si los dos gobernadores mencionados pueden declarar por escrito o en sus oficinas, hay un escrutinio popular sobre ellos y hoy muchas carreras políticas están siendo revaloradas y otras cambiando, rumbo a las elecciones del 2021. Lo que hasta hace unas horas era, probablemente ya no lo es.
Así de fácil.
Así de difícil.
-¡PREEEPAREN!-
La historia.
Pasada la reforma energética, el entonces senador por Querétaro, Francisco Domínguez, defendió su voto a favor de las modificaciones:
“Como senador de la República, como miembro del Grupo Parlamentario del Partido Acción Nacional y como político, mi compromiso es con los ciudadanos. Todo lo que abona al progreso de nuestro país, fortalece también el desarrollo de Querétaro. Sabemos que si la reforma no aterriza en los bolsillos, en la mesa de la gente, no sirve de nada. Lo hicimos, defendiendo con firmeza nuestras posiciones desde el Senado, haciendo política de altura, cerrando filas a favor de lo que le conviene al país, a fin de convertirlo en un potente foco de atracción de inversiones”, señaló.
Desconozco si el mandatario queretano siga pensando lo mismo. O si sus compañeros de bancada y ahora gobernadores, Francisco García Cabeza de Vaca (Tamaulipas) y José Rosas Aispuro (Durango), continúen defendiendo con tal vehemencia el sentido de su voto.
Supongo que no.
-¡AAAPUNTEN!-
Más allá.
Más allá de si ya prescribieron o no los delitos electorales (creo que aquí hay otros, probablemente más graves) lo que me queda claro es que estamos en presencia de un grupo de poder del más alto nivel amafiados todos para disponer del dinero público, la voluntad ciudadana y, sobre todo, el futuro de generaciones de mexicanos. Eso envilece la política y muestra un gran nivel de perversión no visto, por lo menos en Querétaro, en donde ningún gobernador había sido objeto de tan delicadas acusaciones, que van desde la recepción de sobornos hasta haber llegado al poder con apoyos de los contrarios.
Somos nada.
-¡FUEGO!-
Memoria.
Hace algunos años, el gobernador Francisco Domínguez Servién le dijo a un alto mando militar en Irapuato que cuando uno se mete a la cocina sabe que se puede quemar. Tenía razón.
¡Porca miseria!