Carmen Martínez Diez
El viernes 3 de julio, Sergio Ricardo Melesio Nolasco siempre interesado en hacer difusión de asuntos relevantes, publicó en su muro el número de vacunas que se han recibido en México, información de suma importancia de la Secretaría de Salud, para tener claridad del avance que se ha conseguido hasta este momento. Y lo describe de la siguiente manera: vacunas contra el SARSCoV2 mediante 86 embarques en 100 vuelos un total de 59 millones 731 895 dosis. De Pfizer, AstraZeneca, Sinovac, del Centro Nacional de Investigación de Epidemiología y Microbiología Gamaleya, Cansino y Johnson & Johnson. Menciona que en Querétaro se han envasado cuatro millones 758 200 dosis de Cansino y en el Edo de México dos millones564 100 biológicos de AstraZeneca que hacen un total de 7 millones 322mil 300 vacunas para inmunizar a personas adultas.
Es indispensable conocer los datos que nos trasmiten porque los mexicanos tenemos que estar al día con la verdad como ya lo han comentado a través de la Secretaría de Salud; verdad que puede ser inquietante o pacificadora, alarmante o tranquilizadora pero necesaria a fondo para que se actúe en forma precavida sin etiquetar colores que no son, ya sea verde porque es conveniente, cuando quizás sería amarillo o aquéllos que se han designado para tomar las medidas pertinentes según sea el caso. Sin embargo, queda clarísimo que seguimos ante un panorama de pandemia importante cuya presencia será duradera y seguirá así largo tiempo, esto hace obligatorio incrementar las medidas de seguridad que conocemos y siguen fallando en gran medida como el mal uso del cubreboca, no se conserva la distancia mínima de metro y medio a dos metros entre las personas, contar con espacios abiertos y bien ventilados, ya que nos han explicado la permanencia en el aire del virus de partículas que normalmente se pensaría caen por su tamaño al piso sin que así sea del todo. Reglas que sugiere se apliquen en bancos especialmente, centros comerciales y restaurantes. Pues evidentemente no hemos llegado ni siquiera al cincuenta por ciento de los habitantes con inmunización y pareciera además, se le atribuyen, en creencia popular, que la vacuna ya es una salvación. Si bien es fundamental e importantísima, no es suficiente, cae mayor peso en las medidas preventivas en un ambiente todavía de incertidumbre de sus efectos, de lo que pasará con las mutaciones, de cada cuando hay que volver a vacunarse, aún habiendo recibido las dos dosis o una,,según tipo de vacuna.
Hay que hacer énfasis de la necesidad de aplicarse la vacuna sea la que sea, todos quieren, con justa razón, la que se considere más efectiva. Pero dadas las circunstancias todas ellas son bienvenidas y urgente, cada vez más, y que se abarque a la mayor parte de la población cuanto antes, con la celeridad que amerita el caso. Nunca como ahora las medidas de higiene deben ser difundidas en todos los medios posibles como un acto de altruismo hacia todos, sin costo, por televisión, radio, periódicos, carteles, en todo espacio público y colocar de inmediat lavamanos, como desde hace mucho hace falta también los baños limpios al alcance de todos e igualmente explicar, por quienes son expertos, el tema de la limpieza de las mascotas. Digamos que nunca como ahora se debe enfatizar que todo es por amor a la vida, respeto a las personas, y una vida digna para todos,
Pareciera frívolo pero es el mejor momento para impulsar en todas las ciudades lo señalado anteriormente, el impulso de espacios públicos agradables, pequeños, ventilados que hermosean el ambiente y protegen a los comensales. Solicitar la generosidad de la medicina privada que, lamentablemente ha incrementado los costos de manera impresionante igualmente en la industria farmacéutica.