Supuestos normalistas de Ayotzinapa lanzaron petardos contra Palacio Nacional, lo que dejó un saldo de 26 policías lesionados de la Secretaría de Seguridad de la Ciudad de México, incluidos tres mandos.
Hasta el lugar arribaron siete ambulancias del Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas (ERUM), para el traslado de 25 elementos “debido a la gravedad de sus lesiones”.
Por lo menos dos de los policías afectados mostraban heridas con sangre en brazos y cuello, debido a que fueron alcanzados por esquirlas.
“Efectivos de la Policía Metropolitana, Fuerza de Tarea y de Ateneas, que realizaban un despliegue debido a la presencia de manifestantes, resultaron lesionados por petardos y cohetones”, refiere el reporte de la SSC, en el que se detalla que los manifestantes lanzaron objetos, vallas, petardos, cohetones y algunas piezas del mobiliario que presumía la inauguración del Zócalo, recién remodelado, sólo para uso peatonal.
Alrededor de medio día, un grupo de supuestos normalistas, con el rostro embozado, lanzaron los artefactos explosivos, teniendo como objetivo la puerta central de Palacio Nacional.
En el lugar estaban desplegados decenas de policías, con equipos y escudos, pero se vieron obligados a retroceder ante el ataque.
Mientras se realizaba la protesta, integrantes de la Asamblea Nacional de Usuarios de Energía Eléctrica, que también realizaban una manifestación en el lugar, se solidarizaron públicamente con los estudiantes.
“Por Ayotzinapa y por todos aquellos que han perdido a algún familiar”, se escuchó en el sonido.
Más de cinco explosiones se registraron en la parte frontal del recinto, donde despachaba el Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Los estallidos provocaron extrañeza y preocupación entre transeúntes, turistas y funcionarios de Presidencia.
Elementos policiacos de la CDMX lograron asegurar unos siete artefactos, que fueron lanzados contra el inmueble, pero no explotaron.
Al interior de Palacio, elementos de la Policía Militar iniciaron un operativo de guardia, con escudos y extintores.
Luego de la protesta, los supuestos normalistas se retiraron del lugar.
El pasado jueves, tras un mes de diligencias, una juez federal ordenó en la madrugada dejar en libertad provisional a ocho militares implicados en el caso Ayotzinapa, en el proceso que les iniciaron por delincuencia organizada, siempre y cuando paguen una garantía de 100 mil pesos.
Aunque la Guardia Nacional dictaminó que existía un nivel de riesgo “alto” de fuga, Raquel Duarte, Juez Segundo de Distrito en Procesos Penales Federales de Toluca, les otorgó el cambio de medida cautelar a los ex integrantes de los Batallones 27 y 41 de Infantería en Guerrero, informaron fuentes judiciales.
En días pasados, López Obrador y los padres de los 43 estudiantes desaparecidos 2014 acordaron sostener una reunión de trabajo el próximo 3 de junio, un día después de las elecciones, para dialogar sobre los avances del caso.