Más de 123 mil muertos y 100 mil desaparecidos han sumido a México en una escalada de violencia incontrolable. Así lo manifestó Monseñor Martín Lara Becerril, vocero de la Diócesis de Querétaro al externa sus condolencias y solidaridad con los Hermanos Jesuitas por la ejecución de dos sacerdotes en el municipio de Urique en Chihuahua.
Lara Becerril, lamentó que la escalada de violencia se haya extendido hasta los guías espirituales de aquella comunidad “Se llevaron los cuerpos ¿Con qué objeto?”.
El vocero de la Diócesis, urgió a un cambio de estrategia en el combate a la delincuencia organizada. Aseveró que las malas decisiones que se han tomado desde los gobiernos, se ha pagado con la sangre de inocentes. De igual forma, llamó a la sociedad a trabajar en la reconstrucción del tejido social “Es una tarea de todos. Tenemos que involucrarnos todos y rogamos por el eterno descanso de nuestros Hermanos Jesuitas y rechazamos toda forma de violencia”