Una noche histórica que parecía imposible que llegara; un equipo que ilusionó a toda una ciudad, un portero que defendió a toda una institución y un campeón que llegaba a su primera estrella.
Se cumplieron seis años del primer título en primera división de los Gallos Blancos de Querétaro, donde vencieron a las Chivas rayadas de Guadalajara en la final de la Copa Mx 2016. El encuentro disputado en el estadio Corregidora, estuvo lleno de emociones luego de que se definiera al campeón en tanda de penales; ahí, los queretanos aprovecharon la localia y el gran momento de un histórico como lo fue, Tiago Volpi.
Aquel 2 de noviembre de 2016, se respiraba un gran ambiente de futbol en la ciudad de Querétaro; una afición que se encontraba ilusionada y deseosa de que sus Gallos consiguieran su primer trofeo en primera división. El estadio Corregidora se pintó totalmente albiazul y se hizo sentir desde el minuto uno del partido.
El entonces entrenador de Querétaro, Víctor Manuel Vucetich no se guardó nada y mandó al campo a sus mejores figuras como Camilo Sanvezzo, Tiago Volpi, Candelo y el capitán Miguel Ángel Martínez. Por su parte, el ex técnico de Guadalajara, Matías Almeyda también contaba con figuras como Alan Pulido, Osvaldo Alanís, “Gallito” Vázquez y el “Gullit” Peña.
El encuentro se disputó con mucha intensidad, el cuadro visitante puso a temblar en varias ocasiones al cuadro queretano, pero Volpi los mantuvo vivos todo el juego. Incluso los Gallos sufrieron la expulsión de un jugador en el segundo tiempo del encuentro, por lo que tuvieron que aguantar con mucha garra el marcador hasta que el tiempo se agotara.
El árbitro pitaba el final y la tensión en los jugadores se notaba con la llegada de los penales. La afición se hizo sentir y la presencia del arquero queretano convertía aquella noche en una pesadilla para las Chivas; Jair Pereira y Cisneros fallaron por parte del Guadalajara.
Con el marcador a favor de Gallos en la serie, Alan Pulido se paraba desde los once pasos con la obligación de no fallar si quería mantener a su equipo con vida, Volpi lo esperaba en la línea de gol. Alan tiró y aunque el arquero brasileño no lo tapó, este se estrelló con el palo izquierdo, dándole el campeonato a los Gallos Blancos de Querétaro.
Un hecho histórico, lleno de magia para toda la afición queretana que hoy mantienen ese recuerdo con una sonrisa, esperando que algún día su equipo regrese a competir y se aleje de la triste realidad en la que hoy se encuentra.