En un evento realizado en su ubicación de la Col. San Antonio de la Punta, Kellogg reunió a un nutrido grupo de colaboradores, que en total suman 700, para conmemorar que el 16 de junio de 1973 fueron inauguradas sus instalaciones, en las cuales actualmente produce más de 100 millones de kilos de cereal cada año, con el propósito de nutrir a las familias para que crezcan y
prosperen.
En dicho evento estuvieron presentes directivos de la empresa, entre ellos Manuel López Portillo, Vicepresidente de Cadena de Suministro de Kellogg Latinoamérica; y Sergio Bosch, Gerente General de Kellogg Planta Querétaro. También participaron numerosos trabajadores jubilados de la planta, quienes regresaron a su casa para dar testimonio de cómo al paso de los años, ellos como quienes ahora laboran ahí, se dedican por completo a preparar los mejores cereales, mismos que llegan cotidianamente a los hogares de millones de consumidores de todo el Continente.
Al hacer uso de la palabra, López Portillo explicó que Planta Querétaro es uno de los centros de elaboración de cereales más grande y eficiente de Kellogg alrededor del mundo . Expresó que desde los inicios de estas instalaciones, su misión ha sido trascender, como lo demuestra haber sido la primera planta de Kellogg en América Latina; que en ella actualmente se cocinan cereales emblemáticos como Corn Flakes®, cuya receta se mantiene intacta desde que Kellogg nació hace más de un Siglo; también Zucaritas®, Special K®, All Bran®, entre otros, que se comercializan en México, Estados Unidos de Norte América, Canadá así como en numerosos países de América Latina.
Por su parte Sergio Bosch felicitó a los trabajadores por su alto compromiso para obtener los mejores cereales y lograr la mayor eficiencia en el uso de recursos naturales y de energía; esto último, permitiéndoles obtener numerosas certificaciones y reconocimientos por su destacado desempeño ambiental. Hizo extensiva su felicitación a las familias de sus trabajadores, así como a la comunidad, proveedores, clientes y consumidores, por su confianza.
Un momento particularmente emotivo fue cuando Lizbeth Bringas García, la colaboradora más recientemente contratada con apenas unos días en la empresa, tomó el micrófono e hizo ver que trabajar en Kellogg la pone en contacto con productos que forman parte de su vida desde su infancia, porque son los que su familia prefiere; y agregó “nunca pensé que mi nueva familia fuera Kellogg”. Después, Magdaleno Anaya González, colaborador activo con 40 años de servicio, dijo ante sus compañeros “Hemos llegado a esta celebración porque quienes estamos aquí lo hacemos con calidad y compromiso. Yo sigo trabajando con el mismo compromiso de mi primer día en la compañía y sé que todos lo hacemos de la misma manera. Esto es lo que hace de Kellogg la mejor empresa”.
Kellogg se reconoce como una empresa que trasciende gracias a su gente, apasionada por elaborar el mejor cereal y que forja historias de éxito; de ahí que la compañía le haya expresado su mayor confianza para que nuevas generaciones continúen trascendiendo en Planta Querétaro, como lo hacen permanentemente sus cereales con los consumidores.
POR: REDACCIÓN