TERTULIA
Nestor Alejandro y Alfredo
El dueto de cantautores Néstor Alejandro y Alfredo Tello originarios del estado de Hidalgo, llegaron a Querétaro a enamorar a un público que ya los esperaba. En exclusiva para el periódico de Querétaro Plaza de Armas, estos dos jóvenes que ganaron el segundo lugar en el concurso Expo Compositores 2016, durante una tertulia nos abrieron sus corazones y nos permitieron conocer un poco más su intimidad. Hoy conoceremos un poco sobre la mitad del alma de NT, y conoceremos a Alfredo Tello y el momento en que coincidieron en la vida para formar este fabuloso dueto.
ALFREDO TELLO
Alfredo Tello nació el 5 de noviembre de 1984, en Pachuca Hidalgo. Es hijo de Don Pablo Téllez, de profesión carpintero y de Doña Teresa López, quien ejerce como secretaria de Gobierno del Estado de Hidalgo. Alfredo y su hermano mayor tuvieron una infancia unida, a pesar de las limitaciones económicas. Uno de los principales dolores que sufre Alfredo, fue cuando su hermano con tan solo 15 años, abandona el seno familiar para irse a radicar a Florida, donde se prepararía para Chef. “Mi hermano es mi principal ejemplo de lucha. Fue él, quien me enseño que si quieres tener algo en la vida, debes de trabajar para conseguirlo. Ahora es fácil con tantas tarjetas de crédito, tantas tiendas, tantas opciones. Pero recuerdo que a mis 8 años soñaba con un par de tenis Nike. Los cuales eran una constante en la carta de reyes magos. En aquellos tiempos pagar $800.00 por unos tenis era inalcanzable para muchos. Mi mamá tenía el sueldo base de Gobierno del Estado, que en aquellos tiempos eran un $1,200.00 a la quincena. Y mi papá, como todo carpintero daba una fecha de entrega y podía pasar hasta un mes sin cobrar. Mi hermano me enseño que se debe trabajar por todo. Él salía de la escuela y se iba de caddie a un club de golf que estaba cerca de casa. Consiguió un trabajo lavando los platos de una taquería, y fue mi ejemplo. Podían pasar dos meses y llegaba con la playera que habíamos visto y que me decía que se la compraría. Hoy él es Licenciado en Gastronomía con Maestría en Gestión de Alimentos y Bebidas”.
Sobre su iniciación en la música, comento que fue integrante de un grupo de música tradicional latinoamericana donde tocaba junto al exintegrante del grupo Zazhil, el grupo que acompaño en varias ocasiones a Amparo Ochoa y a Oscar Chávez. El gusto y el interés por la música latinoamericana, se lo debe a su padre y recuerda: “Este tipo de música yo ya lo conocía, porque mi papa en la feria de Pachuca, se compraba los casetes de música peruana y andina. Nunca nos dejaba escuchar sus casetes, pero yo ya había escuchado la música por parte mi maestro. Entonces yo llegaba a casa y veía la caja de los casetes de mi papa que nunca abría, que nunca los escuchaba y que no nos permitía tocarla. Un día la abrí y me encontré con un “Tal Silvio Rodríguez” y un “Tal Pablo Milanés”. Los escuche y le platique al Director del Grupo Folclórico y me dice que sí, que ellos tienen sus canciones y cantan. Así que me di cuenta que yo también podía agarrar mi guitarra y decir lo que siento. Recuerdo que mi papa tenía estos casetes y nunca los abrió hasta que yo los encontré. Él tenía un sonido de esos charangueros de barrio y con música de cumbia como los Bukis; los Acosta; Liberación; La mafia; y mi mama era amante de los Yonic’s y de los Bukis.
Comenzó a tocar en bares, cafés y peñas de forma independiente, acompañado únicamente de su guitarra. Participo en eventos y festivales, hasta que un día su destino se entrelaza con el de Néstor, formando así el dueto al que pertenece hasta el día de hoy.
SE ENCUENTRAN
Los dos jóvenes talentosos contaban con carreras independientes, pero se encontraron hace poco más de 12 años, donde coincidían en algunos foros de la Ciudad de Pachuca, como el entonces Café Voces y La Castañeda. En ese entonces Néstor había compuesto una canción de nombre “Abrázame” la cual le gustaba a Tello, pero confundía la autoría con un tema de Camila. Pero fue hasta la apertura de un nuevo lugar llamado “La Peñita Café”, que el propietario y amigo de los dos, gustaba de reunirse a la bohemia, a ver películas o jugar domino y fue ahí donde comenzaron realmente a entrelazarse sus vidas.
“Hasta que un día, a mí me ponen el cuerno, llegue deprimido y no sé porque. Porque eran muy raras las ocasiones que nos sentábamos a platicar y ese día lo hicimos. Le comente que yo quería escribir algo, que traía un coro ahí atravesado. Y comenzamos a escribir la canción y se dio Tranquilo corazón tranquilo y luego Néstor me dijo: Yo traigo un verso atorado y esa misma noche escribimos dos canciones: Espera y Tranquilo corazón, tranquilo”. Comento Alfredo Tello.
Por su parte Néstor, recuerda que había escuchado cantar por primera vez a Tello, en el café Voces, llamándole la atención su forma de cantar, su timbre y su autenticidad, y que le gustaba mucho que su canto fuera diferente a los demás. Recuerda que ese día en “Peñita café” después de la confesión de infidelidad que había vivido Tello, “Nos fuimos a casa de dos amigas. Ellas se sentaron y nosotros con las guitarras en un rincón haciendo las canciones, acompañados de una bonafina. Ese momento fue un parte aguas en nuestras vidas” aseguro Néstor.
En la próxima tertulia Néstor y Tello, nos platican sobre sus experiencias, aprendizajes y sus logros como dueto.