Los actores Johnny Depp y Amber Heard cerraron de manera oficial su divorcio, después de varios meses de enfrentamientos y cruce de acusaciones, entre las cuales destaca que la estrella de la saga Piratas del Caribe golpeó a su pareja.
Depp, de 53 años de edad, acordó entre otros puntos, pagar a Heard siete millones de dólares, que ella donará a dos organizaciones de beneficencia.
Heard, de 30 años, mantendrá a los perros de la pareja, Pistol y Boo, que estaban en el centro del escándalo, cuando se los llevó a Australia ilegalmente en 2015.
De acuerdo con los documentos de la corte, Depp fue acusado de varias agresiones físicas, que culminaron cuando él lanzó un teléfono móvil a la cara de Heard durante una pelea en febrero del año pasado.
Depp tendrá que pagar los 200 mil dólares que costó el proceso judicial y, según algunos medios, tendrá que vender algunas de sus posesiones para afrontar el coste total.
Durante los últimos meses se conoció que sus propiedades incluían mansiones en Los Ángeles, un castillo en París y una isla privada en las islas Bahamas, además de 40 vehículos, entre los que se encontraban varios antiguos y una colección de motocicletas.
La pareja, que no tienen hijos juntos, estuvieron casados durante 18 meses cuando se separaron en mayo de 2016. Heard apareció fuera de la corte con una contusión en la mejilla ese mismo mes.
Depp tiene dos hijos de una relación anterior con la cantante y modelo francesa Vanessa Paradis.