Después de romperse 38 huesos en una accidente con una máquina quitanieves, que casi le cuesta la vida, Jeremy Renner volvió a los sets de grabación con un poco de miedo por las limitaciones físicas, pero con la esperanza de ser de nuevo un hombre de acción.
Estoy en el modo acción de nuevo, pero hay limitaciones. No siento la necesidad de hacer algo si no siento que es lo correcto, pero me gustan los retos y continuaré enfrentándolos por el resto de mi vida
“La acción es una gran parte de mi carrera, como atleta. Pensaba que probablemente nunca volvería a pasar, pero todo lo que podía hacer era intentarlo de nuevo, escuchar a mi cuerpo, si me decía sí o no”, dijo el actor en entrevista.
El estadounidense se puso a prueba en la tercera temporada de “Mayor of Kingstown” (ya en Paramount+), donde se vuelve a poner en la piel de Mike McLusky, hombre influyente y poderoso, lo más cercano a un “alcalde”, que intentar traer justicia y orden a su ciudad, Kingstown, Michigan.
Renner, de 53 años, se atrevió a calificar este nuevo arco narrativo de la producción como el mejor a la fecha.
“En el primer episodio hay una pequeña secuencia de acción. Hacerla fue alentador, pudimos escribir y meter más cosas. Es una posibilidad ahora. Porque no queríamos hacerlo con dobles de acción o ese tipo de cosas. Es muy importante para mí el que yo lo haga o que no aparezca en el show”.
La superestrella del Universo Cinematográfico Marvel, donde interpreta al arquero Hawkeye, admitió que se desafió en el día a día en el set, donde experimentó una batalla constante con su cuerpo y sus capacidades tras su accidente.
“Estaba bastante seguro de que podía hacerlo, pero mi cuerpo me decía algo diferente, así que discutía con mis piernas y mis niveles de energía. Tuve que retroceder cuando era necesario, pero por lo demás seguí adelante, tuve mucho apoyo.
“Pero fue un poco arriesgado y un poco difícil al principio. Tuve que escuchar a mi cuerpo, hacer lo que podía y resistirme a hacer cosas. Tuve mucho apoyo. Con la ayuda de todos lo superamos y aquí estamos”.
En esta tercera entrega, Kingstown se encuentra sumido en un caos violento, y tras la muerte de su madre Miriam (Dianne Wiest), Mike atraviesa un pésimo momento emocionalmente, que detonará agresividad contra todo aquel que se atreva a desafiarlo.
La serie, creada por Taylor Sheridan (Yellowstone) pone en jaque a la familia McLusky, que ha mantenido la paz en la ciudad durante décadas, pues se acaba de instaurar una nueva mafia.
“Tal vez hay como un suspiro de alivio catártico que creo que el público puede sentir por Mike y por el duelo que siente por su madre”, adelantó Renner.
“Creo que la mayor lucha en esta serie todo el tiempo es si podemos encontrar la paz, podemos detener la matanza, podemos detener la lucha, podemos detener la división. Mike busca la unión. Eso nunca ocurrirá, pero hay momentos y creo que lo conseguimos un poco esta temporada”, remató.