Tomas de agua clandestinas, operación de torres ejecutivas sin licencia de funcionamiento, negocios que se han ido a la quiebra y residentes que no tienen certidumbre legal de su patrimonio, son algunas de las formas de actuar que ha caracterizado a la empresa Citi Capital, desarrolladora del complejo habitacional y comercial Central Park y en donde Marta Sahagún y su hijo Manuel Bribiesca, operaban con plena impunidad junto a su socio José Felipe Tomé, ejecutado en Jalisco .
Por un lado, la administración capitalina ha denunciado que dicho complejo, acumula un adeudo de 49 millones de pesos por concepto de impuesto predial. Tal parece que a la empresa que administra los edificios y locales comerciales, nunca le interesó en lo más mínimo regularizar la situación. Y es que aunque el gobierno municipal les ofreció condonar el 100 por ciento de las multas, no hubo acercamiento con la administración.
Dentro de las acciones que podría ejercer la administración municipal, se contempla el remate de alguna de las cinco claves catastrales que conforman el complejo. Cabe recordar que la propiedad se encuentra embargada con al menos dos proceso por la autoridad y ante ello, están imposibilitados para hacer cualquier tipo de operación inmobiliaria.
Los 49 millones de pesos, se generaron por la falta de pago desde el 2017. La situación de Central Park es tan irregular, que los propietarios de los departamentos ni siquiera han podido escriturar sus viviendas.
Aún cuando en el proyecto se contemplaban firmas ancla como Liverpool, cines, , las más exclusivas marcas de ropa y calzado, así como restaurantes , centros nocturnos y hasta hoteles de gran turismo, la realidad es que mas allá de unos cuantos restaurantes de nivel promedio, las firmas y los centros de entretenimiento nunca se instalaron. Gracias a sus irregularidades, otros negocios debieron cerrar sus puertas por las constantes clausuras del municipio.