Hasta el año próximo continuará el desahogo de pruebas en dos de los hechos que más han conmovido a la sociedad queretana, el de Yosheline Arenas, asesinada en diciembre de 2015 y el de la familia ejecutada en Lomas de Casa Blanca, en agosto pasado, por la actuaria Laura Zúñiga y sus cómplices, adelantó a PLAZA DE ARMAS, El Periódico de Querétaro, la presidenta del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Querétaro, doctora Consuelo Rosillo Garfias..
En el caso de la empleada del restaurante Il Diavolo, de Constituyentes, permanece abierta la instrucción y aún no se han desahogado las pruebas del inculpado y está retrasando la sentencia, según fuentes cercanas al proceso. Por lo que respecta al crimen de Lomas, los cuatro meses de la investigación complementaria vence el próximo jueves, pero tal vez se prorrogue el plazo porque los juzgados ya entraron en receso vacacional.
CASO YOSHELINE
A más de dos años del homicidio de Yosheline Arenas Heredia, hostess del restaurante Il Diávolo de la Avenida Constituyentes, aún no hay sentencia en contra del presunto responsable, Fernando García Ávalos (a) Kenji, acusado de homicidio calificado. Fuentes cercanas al caso, radicado en el Juzgado IV Penal, a cargo de Oscar Martínez Mancilla, indicaron que hay pendiente de resolver un recurso de apelación y uno de reconsideración, además de que el acusado renunció nuevamente a ser juzgado dentro del plazo legal, por pruebas pendientes de desahogo.
El recurso de reconsideración tiene que ver con una prueba admitida y el de apelación por una negada. Por ello no existe aún fecha para el cierre de la instrucción y mucho menos para el dictado de sentencia. Las mismas fuentes explicaron que el inculpado puede renunciar a sus términos sin límite.
La defensa había pedido reclasificar el delito, argumentando que el homicidio fue preterintencional, en el marco de una sesión fotográfica y que no había la intención de causarle la muerte a la joven,
Como se recordará, la joven Yosheline –de 19 años de edad- y “Kenji”, supuesto estudiante de sistemas computacionales, originario de la Ciudad de México, coincidían en la iglesia denominada Conexión Vertical del Municipio de Corregidora, en donde se relacionaron.
La joven Arenas Heredia desapareció el 11 de diciembre del 2015, después de acudir a un gimnasio en la capital queretana. Un video obtenido por la familia y avalado por la Procuraduría de Justicia del Estado, la ubicó subiéndose a un vehículo Yaris de Toyota, color gris, con placas de circulación del estado de Nuevo León.
Durante varias semanas la familia pidió el auxilio de las autoridades y de la sociedad para localizar a Yosheline, cuyos restos aparecieron el 18 de enero en un predio de Saldarriaga, sin que en un principio se pudiera confirmar su identidad.
Pruebas de ADN y tatuajes que se había realizado junto con Fernando García Ávalos en un establecimiento de Jardines de la Hacienda no dejaron dudas de que se trataba de ella.
La familia sin embargo se aferraba a la idea de que hubiera un error y solicitó un proceso de rehidratación de los restos, que desafortunadamente ratificó el resultado.
Sin embargo fue hasta febrero del 2016 cuando pudo acreditarse la presunta responsabilidad de Fernando García Ávalos, detenido en su domicilio del Fraccionamiento Las Bahamas, en la Avenida Camino Real de Corregidora.
En el cateo se encontró parte de la cuerda utilizada por “Kenji” en la sesión con Yosheline, causándole fractura de la quinta cervical y muerte por asfixia.
El día 25 de febrero de 2016 se le dictó formal prisión a Fernando García Ávalos, quien permanece desde entonces en el Penal de San José El Alto, renunciando a los plazos legales para recibir sentencia, en una lucha por tirar el cargo de homicidio calificado por el que podría recibir una sentencia de 50 años o si prospera su defensa salir en libertad.
TRIPLE HOMICIDIO
El otro caso es el del triple homicidio ocurrido en Lomas de Casa Blanca a partir de un triangulo sentimental entre abogados, ocurrido el 14 de agosto de este año, cuando la actuaria Laura Zúñiga Moreno mató a la esposa de su amante y a sus dos hijos.
“Soy un monstruo, maté a una niña, a un niño y a una señora” le habría dicho Laura Zúñiga Moreno a su amigo Antonio Mejía Alcántara, unas horas después de los asesinatos. Lo anterior forma parte de la audiencia en que el juez de control Brian René Baltazar Ramírez decidió su vinculación a proceso por homicidio calificado y del cual puede recibir una sentencia de hasta 50 años de cárcel.
La mujer, acompañada de su abogado particular, Leopoldo Ángeles -ex presidente del Tribunal Superior de Justicia- escuchó los cargos de parte de los tres representantes de la Fscalía General, encabezados por Edgar Francisco Varela Medina, director de acusación, a quienes nunca volteó a ver en la hora y diez minutos de la audiencia celebrada en la sala marcada con el número 5 en la planta alta del Cereso de San José El Alto y en la que PLAZA DE ARMAS, El Periódico de Querétaro, fue el único medio presente.
Ahí se estableció la relación extramarital entre Laura Zúñiga Moreno y Sergio Ríos Quintanar, aunque la inculpada, detenida el día anterior en Quiroga, Michoacán , se reservó su derecho a declarar y no presentó controversia a ninguna de las acusaciones en donde se establece que ella planeó y ejecutó los homicidios de Yolanda y los menores Sergio y Selene, con la ayuda de José Luis Elizárraga Sánchez y José Guadalupe Juárez, también procesados.
De las 13:09 a las 14:19 de ayer se desarrolló la diligencia pública, ante unas 20 personas advertidas por la secretaria del juzgado de no alterar el orden, so pena de aplicar medidas de apremio. La funcionaria también pidió a la presunta responsable y a los abogados mantener durante todo el tiempo una actitud de decoro y respeto, hablando con voz en tono fuerte y claro, sin ademanes al dirigirse al juzgador.
Se iniciaba el juicio de uno de los casos más conmocionantes de los últimos años, el del triple asesinato ocurrido en el número 707 de la Calle 1 A de la Colonia Lomas de Casa Blanca, aproximadamente a las seis y media de la mañana del día 14 de agosto.
Y en unos minutos surgieron, a borbotones, los datos.
La presunta responsable habría planeado y consumado la ejecución de la esposa e hijos de su amante utilizando ella misma un arma de fuego que llevaba y dos cuchillos encontrados en la cocina del domicilio.
Vestida con la misma ropa que utilizaba el lunes al ser capturada -sudadera azul, chaleco y pantalón de mezclilla- la inculpada o “Laura”, como le llamó todo el tiempo el juez de control, se mantuvo con la cabeza baja y en silencio, inmutable ante las acusaciones.Explicó la parte acusadora que Sergio Ríos Quintanar instaló a su amante en una casa de la Colonia Vista Alegre, luego de que tuvo problemas con su familia al saberse la relación extramarital. Ahí precisamente, en Mimiahuapan 333, la Fiscalía halló fotografías de ambos, cepillos de dientes con el mismo perfil genético descubierto en los guantes de látex encontrados en la escena del crimen, además de las pruebas de embarazo junto a la cédula profesional de ella y restos de ritos esotéricos.
Se indicó que luego de los hechos, ocurridos en cuanto Sergio Ríos Quintanar, el jefe de familia, salió a trabajar y la esposa e hijos se aprestaban a las labores cotidianas, penetraron Laura y sus cómplices a la casa, en donde con lujo de fuerza sometieron y ejecutaron a los tres.
Después de la matanza, todavía la triple homicida se presentó a checar tarjeta en su trabajo en el Poder Judicial, a las 9:16, pero se ausentó de inmediato, yendo a buscar a su amigo Antonio Mejía Alcántara para confesarle lo ocurrido: “soy un monstruo, maté a una niña, a un niño y a una señora; les disparé”.De acuerdo con su confidente y ahora testigo, la mujer le había contado antes sobre la relación que supuestamente iba a culminar con el matrimonio en diciembre, porque entre el 8 y 9 de agosto se había hecho los exámenes de gravidez y resultaron positivos.
Es más, aseguran hay un mensaje de texto de Ríos a su esposa en donde le planteaba el divorcio. El teléfono de Yolanda, robado por Laura después de la tragedia, se lo habría enviado a su padre para demostrarle que la relación era seria.
Lo cierto es que en la víspera de los hechos ella exigió una cita con su amante y ya no hubo tal encuentro, por lo que decidió planear y consumar el ataque contra la familia de Sergio.
Hay la certeza, dictaminó el juez de control, de que Laura es coautora material directa.
Ella habría ordenado que se atara a la víctimas y se cubrieran sus rostros para matarlas, sin concederles ninguna posibilidad de defensa.
En la diligencia se dio cuenta también de las autopsias practicadas a las víctimas y se mostraron imágenes de la escena del crimen, en una pantalla. Con estas evidencias y testimonios presentados y no habiendo controversia, quedó establecida racionalmente la participación de Laura en el delito de homicidio calificado con agravantes, porque se actuó con dolo al planear y reflexionar sobre el hecho, la ventaja numérica y el conocimiento de la autora, abogada de profesión con estudios de postgrado, sobre los alcances del delito. Por lo tanto el juzgador Brian René Baltazar Ramírez decretó la vinculación de procedimiento, su prisión preventiva que no excederá de dos años y un plazo de cuatro meses para la investigación complementaria, contados a partir del 20 de agosto cuando inició el proceso a sus dos cómplices y con vencimiento el 21 de diciembre.
Por su parte el ex magistrado presidente Leopoldo Ángeles, abogado particular de Laura Zúñiga, no hizo ninguna observación a las acusaciones de la Fiscalía, indicó que las presentaría en el transcurso del juicio, se adhirió al plazo establecido de cuatro meses, solicitó copia de todo el expediente y tenérsele como defensor para acceder a entrevistas con su cliente. Con ello dióse por concluida la audiencia del triple homicidio de Lomas de Casa Blanca que ha conmovido a la sociedad queretana.
Es possible que la audiencia, programa para este jueves, se posponga por las vacaciones del poder Judicial.
POR: SERGIO ARTURO VENEGAS ALARCÓN