23 de marzo de 1903, Castillo de Chapultepec.
En la sala principal del alcázar, morada del Presidente General Porfirio Díaz se alza frente a la puerta un óleo de extrañeza y recaudo, una obra realista que deja ver sus detalles y finas pinceladas, al irse acercando cada vez de más detalle se mira la calidad de la obra del pintor madrileño Mariano Salvador Maella, un rojo intenso resalta al observador y la mirada alcanza a contar las finas y detalladas maniobras del aquel entonces virrey Bernardo de Gálvez quien es considerado un héroe de la independencia de los Estados Unidos por haber expulsado a los británicos con su ejército el la batalla de Pensacola en los lúgubres pantanos de la Florida.
Por extraño que pareciera el pintor carga de un sinfín de simbolismos a esta su obra de mayor relevancia, muescas, ángeles a contra relieve, joyas no vistas en el virreinato, águilas americanas, pareciera que este prolífico representante de Carlos III en las tierras de ultramarinos está en otra dimensión, como si una historia y otra más se contara a la misma vez.
Una voz se escuchó desde dentro del pasillo de finos vitrales coloridos en emplomadas tiras tan precisas que pareciera la obra era de un orgánico sencillo, un fino trazo de la naturaleza convertido en satín de cristales.
– ¡Mi amigo Don Desiderio! Que gusto el contar con tu visita a nuestra humilde casa ¡Dame un abrazo anda! – entre risas y alegorías varias el presidente Díaz le recibe en el salón del alcázar del Castillo de Chapultepec, obra misma del virrey Bernardo de Gálvez.
-Presidente el gusto es mío, disculpe la tardanza en la llegada, pero ya sabe que las carrozas no tienen palabra ¡El caballo se quebró! Tuvimos que conseguir otro.
-Pero pasa amigo por favor, te veo deteriorado, anda, ahora me contarás.
Los dos subieron por la suntuosa escalera que lleva al patio de iluminación, un hermoso recinto rodeado de verdes plantas, sonoros cotorros multicolores, en el centro un catering de elegancia manufactura les recibe en un acanelado aroma de café, tonos sepias de la mañana aún le dan al astro sol un sentido de viveza, la pureza de la cascada que resuena da un alivio al visitante.
-La pintura que observabas Desiderio es tal vez el resumen de lo que un hombre debe ser, el virrey que miras era nada más quien mandó construir este castillo, único en todas las américas, Don Bernardo de Gálvez, un loco adinerado de la nobleza española que sacó jugo a su vida.
-Suena interesante señor presidente- decía Don Desiderio mientras saborea los panqués con finos tonos de cereza y una miel real que dora los crocantes trozos de tocineta.
-Y se pone mejor amigo, siendo muy joven decide ir a conquistar a los pueblos Apaches de los territorios de Chihuahua con un ejército de soldados de las colonias llevándose las victorias en todas y cada una de sus sangrientas aventuras. Pero antes estuvo en la invasión de Portugal donde fue lastimado de un brazo y no le permitía lanzar con arco una de sus actividades que más le apasionaba.
-Pero presidente este personaje es toda una leyenda por lo que me cuenta ¿Cómo era posible que un español ayudara tanto a los insurgentes americanos de los británicos?
-Los héroes amigo Desiderio no están en un bando o atribuyen sus gallardías a una nación, muchos de ellos ni siquiera existía la patria que defendieron ¡Ellos la construyen! El verdadero héroe es quien busca la justicia, igualdad y libertad, este virrey después será gobernador de Luisiana.
Los ojos de asombro de Don Desiderio no paran – ¿Gobernador? Qué señor-.
-Así es amigo – mientras el presidente se limpia el café de sus dorados bigotes, continuó – siendo gobernador comandó los ejércitos de Pensacola para liberar de los británicos de las tierras de Norteamérica y ser considerado un héroe nacional, a tal grado que tiene un día de celebración al libertador de las colonias y sentido amigo de la nación, conquistó la Florida, Luisiana, las Bahamas, la Isla de Cuba.
– ¡Es increíble! Disculpe presidente que bueno está este pan – mientras se saborea con un espeso chocolate poblano – ¿Cómo llegó a ser virrey? -.
-Siendo el hermano de su padre el encargado ministro de indias José Gálvez, el puesto de mayor jerarquía en la corona española, después de la nobleza en un cargo de alta responsabilidad, le envió una misiva al rey Carlos III recomendando a su sobrino acompañado de una carta de George Washington haciéndole ver los favores a la recién nación norteamericana como un alto candidato a ser considerado Virrey ¡Y se le otorgó!
– ¡Suerte te regale Dios que el saber nada te importe! Señor presidente.
-Así fue amigo, pero no quedó ahí, una vez instaurado como Virrey de los territorios de ultramarinos de la Nueva España, que incluía todos los territorios de las Filipinas, en funciones tuvo la desdicha de enfrentar la mayor sequía de la historia de los tres siglos de poder ibérico ¡La hambruna! Debido a que por dos años no llovió en la planicie central del país.
– ¡Que infortunio! Mi padre se dedicó por toda su vida al comercio de materias y proveedurías de accesorios para la siembra del trigo principalmente y sabíamos muy bien de ciclos de cosechas, infortunados casos de pérdidas totales dejando en la vil pobreza a familias de gran posición.
-Por eso amigo una vez que se remodeló este Castillo logramos rescatar este magnífico óleo de manufactura de un ardid del pincel, el cual resguardo con entrega de un hombre que construyó su futuro con sus propias manos, estando listo para aprovechar cada una de las oportunidades que la vida le regaló, defendiendo no a una nación sino un interés legítimo ¡La justicia!
Ambos alzaron la taza de café en señal de brindis.
-Dígame mi bien aventurado y sufrido amigo – sabedor de los últimos acontecimientos en la vida del comerciante más prolífico de la región, por puño y letra del propio hijo de Don Desiderio que ha mantenido informado al señor presidente- ¿Qué me cuenta de sus andanzas? ¿Ya tenemos Cámara de Comercio en Querétaro?
-Nos falta la presentación ante la legislatura señor presidente que se tuvo que detener porque trataron de asaltarme, me lastimaron y pues estuve unos días ausente.
-Dime fino amigo – en lo que les retiran el servicio y solo dejan los cafés- ¿Quién realmente te ha ayudado? Pero deseo que seas sincero, somos solo usted y yo quienes sabemos ante esta indicación que busca la mejora del centro comercial de la región enclavado en su ciudad, no olvidemos que buscamos justo lo que platicamos ¡Justicia y desarrollo!
-Seguramente ya lo sabe presidente, pero el apoyo del gobernador el ingeniero González de Cosío es nulo, bueno, mi familia sospecha de que es el autor del secuestro y del asalto hace apenas unas semanas, su secretario particular es un verdadero truhan, por un lado, me destina todo el recurso humano administrativo con sus archivistas, pero en simples dos días hace perdedizo documentos y folios ¡Una verdadera calamidad! Los comerciantes nos hemos reunido casi a escondidas, pareciera somos una cofradía secreta.
-Justo así me refiero a tener que considerar que se tome en lo futuro mi amigo la constitución de la Cámara de Comercio, de otra manera se ensuciará todo el proceso, corremos el riesgo de que salgan nuevos postores que deseen incorporarse y la tenemos que sostener con un limitado espacio a decidir.
– ¡Indíqueme por favor presidente el camino! Si logramos que el gobernador no se inmiscuya tendremos la Cámara para unos cuantos días, pero si continúa saboteando mucho me temo que mi salud ya no alcanzará siquiera para una segunda oportunidad.
– ¡Vamos señor no se desanime! Tomemos a pulso la estafeta como el Mercurio de los dioses y demos por adelante la Cámara, solo imagine amigo mío que ya está ¡Cómo los arquitectos! Que en su mente ya tienen construido todos y cada uno de los centímetros de la magna obra a fino detalle ¿Estamos mi señor?
– ¡Lo hacemos señor presidente! – entusiasmado Don Desiderio le correspondía. Caminaron por el sistema de brillantes coloridos vitrales, bajaron por la elegante escalera de hierros fundidos y se establecieron en el despacho de aromas de cedro, le esperan algunas personas concernientes a la verdadera reunión del día ¡La división y nacionalización de predios de la Hidroeléctrica!
Notaria de Manuel Esquivel, Querétaro 23 de marzo de 1903.
Los servicios jurídicos que oferta la notaria de la familia Esquivel Rodríguez por la vocación de la ciudad está alineada al Código de Comercio que se está innovando cada año, lo mismo los trabajos legislativos cruzan entre la relevancia de impuestos locales, constitución de nuevas ramas comerciales de su relevancia en desarrollo de la entidad, un litigio por allá, una renta de un local que por la compra de materia prima en deficientes condiciones.
La ciudad comienza una nueva etapa en donde la vocación sea más hacia la producción agrícola y por supuesto el comercio, ocupando las tierras de la zafra en producción de trigo y hortalizas, lo cual tiene metidos a los destiladores en continuas reuniones con la autoridad competente, ya el gobierno del estado ha dado indicios de nacionalizar las tierras que no se cambien al uso de productos de la región y dejar a un lado esa imagen en la región de que Querétaro solo es una tierra de “borrachines rijosos”
El notario Esquivel lleva varios meses haciendo al cálculo de los propietarios de las tierras productoras de caña para mandar el reporte al gobierno del estado, ocupando gran parte de su tiempo en entrevistas, visitas y constantes observaciones dando fe de las condiciones de los trabajadores – que son deplorables – el pésimo pago de salarios, casas habitación en las que se encuentra acinados en especie de cárceles que más bien asemejan mazmorras inquisitoriales que casas de trabajo y la salud de los mismos que en sí no son atendidos y sufren de constantes enfermedades que debilitan la fuerza productiva.
Junto con su hijo Alfonso -apenas aprendiz de escribano- le comunica las siguientes estrategias para lograr un reporte sano y atendiendo la verdad, en la medida que le sea posible ¡Deben justificar desde la perspectiva jurídica la razón de la nacionalización! Situación nada sencilla.
-Mira hijo este es el reporte que se realizó después de la afamada Exposición Internacional de Querétaro, el treinta de abril de 1882 en el portal del Diezmo, en la cual se destinaron recursos mayores a lo esperado y comercios patrocinaron dicha ocasión, si observas en este dato la vocación de nuestra ciudad era en los ramos de hilados y tejidos, cerámica fina, ebanistería de la mejor, joyería, sombrereros, adornos y tabacos, claro con lo referente a la comida ¡En ninguna parte se establece las bebidas destiladas como el ron y el añejo! Aquí echamos para abajo el argumento de los destiladores como vocación histórica de su presencia en estas tierras.
-Pero también hacen la remolacha y el piloncillo que son esenciales para nuestro diario padre mío.
-En ello estoy de acuerdo, pero la venta de ron se está excediendo, no se produce bajo ninguna observación de la autoridad lo cual nos limita a que se esté vendiendo de más y no se les requiere impuesto alguno de pago ¡Se van por el descanso de no tributar!
Los dos continúan escudriñando los folios que les habían pasado para lograr justificar parte de lo que será una de las jugadas de mayor impacto en el sector de los destiladores, por un lado se cuentan veintisiete destiladoras de las cuales se obtiene toda la variedad del azúcar morena, remolacha, refinada para pastelerías y panaderías, alcohol para la limpieza de instrumentos pero lo que no se da a conocer era la producción de rones los cuales se afamaron, constituyen más del 63% de las ganancias, además de controlar los expendios de pulque que ahora combinan con la presentación de las botellas de ron a la asidua concurrencia ¡Aquello ha convertido a los barrios de la plaza alta en un bodrio de cantinas!
La joven que sirve de recepcionista de la notaría entró de color del papel.
– ¡Disculpe señor notario! Afuera hay una multitud que con garrotes y palos desean ingresar, ya Don Julián y el abogado Martínez están tratando de que no ingresen ¡Es una turba!
Los dos caminaron hacia la ventana para observar de más cerca ¡Cuando una roca pegó rompiendo los cristales de la misma! El notario se levantó con el rostro lleno de grana figura que chorrea por su frente y labios, su hijo le tomó, al dar el paso por la recepción ¡El portón cedió al empuje de los gamberros! Colapsó y lastimó a quienes resistían.
¡Saquearon el lugar!
Continuará…