México mantiene las señales de recuperación económica y aleja de forma preliminar las expectativas de una estanflación, según expresaron analistas tras revelarse el crecimiento de la economía mexicana.
De acuerdo con las cifras preliminares del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el producto interior bruto (PIB) mexicano creció un 1 por ciento en el tercer trimestre de 2022, su cuarto incremento trimestral consecutivo.
“El PIB (mexicano) acumula cuatro trimestres seguidos registrando crecimientos a tasa trimestral, con lo que, hasta el momento, la posibilidad de que se presente un escenario de estanflación ha bajado considerablemente”, comentó a EFE Janneth Quiroz, economista en jefe del Grupo Financiero Monex.
La también profesora del Tecnológico de Monterrey indicó que con el último avance trimestral, el tamaño de la economía mexicana mantiene un nivel similar al de hace casi cinco años, es decir, al que tenía en el cuarto trimestre de 2017.
También señaló que, si se mantuviese este ritmo, el próximo trimestre alcanzaría el nivel observado en el cuarto trimestre de 2019, previo a la pandemia, y el de su máximo histórico más reciente, en el tercer trimestre de 2018.
“Al PIB aún le falta recuperar 0.05 por ciento para alcanzar el tamaño que tenía antes de COVID-19 debido al rezago de las actividades terciarias”, matizó Quiroz.
Aparte, Jonathan Heath, subgobernador del Banco de México, subrayó que la estimación del crecimiento de la economía mexicana no es definitiva y que podrán presentarse revisiones futuras, aunque estimó un crecimiento del PIB mexicano de 2,6 % para este año si no se tuvieran cambios.
“Es muy probable que veamos revisiones (menores) en los crecimientos de los trimestres anteriores. Pero suponiendo que no hubiera revisiones y que el crecimiento del cuarto trimestre fuera 0.0 por ciento, el PIB habrá crecido 2.6 por ciento en 2022”, comentó en su cuenta de Twitter.
Por su parte, Carlos Morales, director de calificaciones soberanas de Fitch, coincidió en observar “una recuperación económica estable” de México.
“El crecimiento ha sido liderado por la producción manufacturera dada la disminución de las interrupciones en la cadena de suministro”, resaltó en un comentario enviado a medios.
El analista dijo que la mejora laboral sostenida con más de 21.4 millones de trabajadores formales registrados en la economía mexicana, junto con las sólidas entradas de remesas, “ha respaldado un consumo constante”.
Aún así, Morales añadió que la inversión “seguirá siendo un lastre para el crecimiento económico, ya que el aumento de la incertidumbre mundial y la intervención política perturban la confianza empresarial”.
El directivo advirtió que el mayor riesgo para la economía mexicana es la posible recesión económica de su principal socio comercial, Estados Unidos.
“La creciente probabilidad de una recesión en EE.UU. es un riesgo clave para las perspectivas de crecimiento de México. Una importante oportunidad de crecimiento para México, dadas las crecientes tensiones entre Estados Unidos y China”, manifestó.