El candidato en Querétaro al Senado de la República por la coalición “Fuerza y Corazón por México”, Agustín Dorantes Lámbarri, afirmó que los retrasos de la obra en 5 de febrero, que se había señalado marzo como periodo de entrega, no representaría costo político para su campaña.
Sin embargo, al reconocer el retraso, consideró que se “debe pedir una disculpa” a la sociedad queretana. Recalcó que la obra beneficiará en la despresurización del tráfico vehicular; y agilizará la operatividad del transporte público.
“Cuando comparas 5 de Febrero con el Tren Maya, que costó el triple de lo que iba a costar, y que se han tardado más del doble en lo que dijeron que se iba a tardar, y que además ya se descarriló. Lo cierto es que aquí si tuvimos un retraso, y me asumo porque fui parte de la administración, y hay que darle la cara a la ciudadanía, pedirle una disculpa; pero lo cierto es que la obra va a librar una presión que se tenía”, advirtió.