En entrevista, Gustavo López Acosta, Comisionado Estatal del Centro Penitenciario, proporcionó un detallado informe sobre la situación actual de los centros penitenciarios en el estado de Querétaro, destacando tanto los desafíos como los avances significativos en materia de reinserción social.
López Acosta informó que en el estado hay más de 3 mil personas privadas de la libertad, de las cuales muchas están encarceladas por delitos mayores como robo, violencia familiar y homicidio. En respuesta a estos delitos, los centros penitenciarios han implementado diversos programas y talleres para concienciar a los reclusos sobre sus acciones y prepararlos para su eventual reintegración en la sociedad.
El Comisionado destacó que el modelo de reinserción en Querétaro está centrado en la dignidad y autodeterminación de las personas. A su ingreso, cada recluso es evaluado por un equipo multidisciplinario que incluye sinólogos, psicólogos, personal de seguridad y médicos. Este enfoque personalizado permite diseñar un plan de actividades que promueve la educación y el trabajo durante su estancia.
Precisó que, en los últimos dos años, más de 250 personas han culminado sus estudios de primaria, secundaria y preparatoria dentro del sistema penitenciario. Además, los reclusos tienen acceso a trabajos remunerados en tres modalidades: trabajos a favor de la comunidad, trabajos para terceros (empleo por empresas) y autoempleo. Los productos elaborados por los reclusos se exhiben y venden en la “Galería de Talento y Libertad” en Querétaro.
López Acosta también habló sobre los programas especiales para mujeres privadas de la libertad que son madres. Según la ley, estas mujeres pueden tener a sus hijos con ellas hasta los tres años, asegurando una alimentación, salud y educación adecuadas para los menores. Actualmente, dos mujeres se encuentran en esta situación en Querétaro.
En cuanto a Infraestructura y Reconocimiento Internacional, señaló que, Querétaro ha sido reconocido a nivel nacional e internacional por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos y otras organizaciones por la calidad de sus centros penitenciarios. Recientemente, se inauguraron nuevas aulas y talleres dentro del centro penitenciario para continuar mejorando las condiciones y oportunidades para los reclusos.
En materia de salud, comentó que, desde el inicio de la pandemia, los centros penitenciarios han trabajado en estrecha coordinación con la Secretaría de Salud para implementar protocolos específicos que han permitido controlar la propagación del COVID-19. Estos protocolos incluyen pruebas aleatorias y el uso continuo de cubrebocas en ciertas áreas.
El Comisionado finalizó la entrevista destacando las constantes convocatorias para aquellos ciudadanos interesados en unirse al sistema policial o trabajar en los centros penitenciarios. A pesar de los estigmas, algunas empresas han colaborado ofreciendo empleos a los reclusos, proporcionando capacitaciones y salarios justos.
Es de destacar, el enfoque integral y humanitario del sistema penitenciario de Querétaro, centrado en la educación, el trabajo y la dignidad de las personas privadas de la libertad, ha permitido que el estado se posicione como un modelo a seguir tanto a nivel nacional como internacional.