Hawaii puede proseguir con la que sería la primera demanda contra el nuevo decreto migratorio del presidente Donald Trump, dijo el miércoles un juez federal en Honolulu.
El juez federal de distrito Derrick Watson accedió a la solicitud del estado de continuar con el proceso y estableció una audiencia para el 15 de marzo, el día previo a la entrada en vigor de la orden ejecutiva de Trump. El nuevo decreto prohíbe la emisión de visas nuevas a ciudadanos de seis naciones de mayoría musulmana, y cancela temporalmente el programa de refugiados de Estados Unidos.
Funcionarios en el mayoritariamente demócrata estado de Hawaii habían demandado previamente para detener el decreto inicial de Trump, pero la querella fue suspendida tras diversas impugnaciones jurídicas a la orden ejecutiva.
Un día después de que el gobierno de Trump anunció su nuevo decreto, abogados del estado presentaron la noche del martes su revisión propuesta en una corte federal, junto con una moción solicitando que se le permita proceder.
El juez Watson aprobó la moción y dijo que el estado presentaría la demanda final más tarde el miércoles. La fiscalía general de Hawaii no proporcionó más detalles sobre la querella, pero dijo que la prohibición perjudicará a la población musulmana de Hawaii, al turismo y a estudiantes extranjeros.
El Departamento de Justicia federal rechazó comentar sobre la demanda.
El estado argumentará en la audiencia del 15 de marzo que el juez debería emitir un interdicto temporal que impida que entre en vigor el decreto, hasta que se resuelva la demanda.
La querella de Hawaii dice que es para proteger a sus residentes, negocios y escuelas, así como a su soberanía, “contra acciones ilegales del presidente Donald J. Trump y el gobierno federal”.
La orden ejecutiva afecta a gente de Irán, Siria, Somalia, Sudán, Yemen y Libia. No aplica a viajeros que ya tienen visa.