El Gobierno de España aprobó la declaración de zona gravemente afectada por una emergencia de protección civil para Valencia y el resto de zonas inundadas la semana pasada, lo que facilitará la entrega de ayudas a los damnificados, ha anunciado el presidente del ejecutivo, Pedro Sánchez.
Sánchez ha asegurado que su gabinete trabaja “desde el primer momento” en cuatro ámbitos prioritarios: salvar vidas, recuperar el cuerpo de las víctimas “con la prontitud y la dignidad que merecen”, garantizar la seguridad en las calles y restablecer los suministros y los servicios de las zonas afectadas.
El primer paquete de medidas, aprobadas por el Consejo de Ministros, tiene un costo total de 10 mil 600 millones de euros, a distribuir en 78 municipios en el este y el sur de España (75 de la Comunidad Valenciana, 2 de Castilla-La Mancha y 1 de Andalucía), para ayudar a los hogares, y también a las empresas, a los autónomos y a las instituciones afectadas por la dana, pero el listado “podrá ampliarse a otros municipios, a otras comunidades autónomas” y “con el menor papeleo posible y la mayor celeridad y agilidad”.
Dentro del plan de ayudas, el Gobierno de España pagará el 100 por ciento de los gastos de emergencia que tengan los ayuntamientos afectados y abonará hasta el 50 por ciento de todas las obras que tengan que llevar a cabo en los próximos meses y años para reparar infraestructuras, instalaciones y servicios como carreteras, polideportivos, o centros cívicos.
La actuación del Gobierno constará, ha añadido, de tres fases: la primera de ellas, una respuesta “urgente” ante la catástrofe; la segunda, la reconstrucción de las zonas afectadas y, la tercera, la fase de “relanzamiento” que se enfocará a la “transformación necesaria para adaptar el territorio a la emergencia climática” que “está afectando singularmente a nuestro querido mar Mediterráneo”.
Sánchez ha precisado que el número de militares, policías nacionales y guardias civiles desplegados en la provincia de Valencia ha pasado de 7 mil 300 efectivos a 14 mil 898, reforzados por la presencia de 287 brigadistas forestales, un centenar de agentes aduaneros, 44 médicos forenses y 600 vehículos y maquinaria especializada para el bombeo la limpieza y el abastecimiento de las zonas afectadas.
Según sus datos, también se ha restablecido el suministro eléctrico del 98 por ciento de los hogares afectados y se ha reparado 40 km de carreteras, 74 km de vías ferroviarias, además de habilitar todos los carriles de la A 7, también de la A 3 norte y reactivar el servicio de trenes de media y larga distancia entre las ciudades de Valencia y Castellón, Tarragona, Teruel y Barcelona.
Sin embargo, “esto no es suficiente, aún quedan desaparecidos por localizar, viviendas y negocios destruidos, sepultados bajo el lodo y mucha gente que sufre carencias severas”.
De hecho, este martes ha sido encontrado en la localidad albaceteña de Letur (sureste de la península) el cuerpo de uno de los desaparecidos del 29 de octubre a consecuencia de la dana.
También el presidente regional de la Comunidad Valenciana, Carlos Mazón, ha anunciado que comparecerá el próximo jueves 14 de noviembre ante las Cortes valencianas (parlamento regional) para dar explicaciones públicas de la gestión de la catástrofe.
En cuanto a Sánchez, ha recordado que “aún queda mucho por hacer” y por ello ha anunciado que no entrará en debates políticos hasta que se aclare la situación porque “ya habrá tiempo tanto en las Cortes valencianas como en el Congreso de los Diputados para analizar las responsabilidades de cada cual y saber exactamente cómo mejorar los sistemas de Protección Civil”.