Los resultados que obtiene Sergio Pérez cada fin de semana de carrera, sean buenos o malos, generan ganancias para Red Bull.
Para nadie es un secreto que la popularidad del mexicano ha ido en aumento desde que firmó con el equipo de las bebidas enérgicas, ya que sus aspiraciones en la Fórmula Uno también crecieron al convertirse en el estandarte mexicano y latinoamericano.
El lazo que día a día construye Checo con su base de fanáticos, y con los que se van sumando, le da ese impulso DRS para imponerse a su compañero Max Verstappen fuera de la pista. “El carisma es algo que se puede construir porque se pueden desarrollar ciertos elementos que acercan más a una figura pública con su mercado y Checo tiene esa chispa que conecta, que cae bien”, explicó Alberto Tello, consultor en comunicación estratégica.
Deportivamente, el bicampeón lidera el Campeonato de Pilotos con 364 puntos, mientras que Pérez es segundo con 219.
En cuanto al valor social, el conductor tapatío lleva la delantera, considerando las impresiones, interacciones y tiempo de exposición de la marca Checo, correlacionados con el número de publicaciones.
De acuerdo a datos publicados por Zoomph, empresa de análisis de marcas, en 2022, Verstappen hizo 755 publicaciones con 59.8 millones de interacciones de los usuarios (engagment), en cambio, Pérez, con menos post (473), creó un mayor nivel de compromiso, con 60.7 millones.
“Red Bull puede estar alcanzado 3 millones y medio, y eso es un retorno de inversión, que si lo multiplicas por 20 carreras, estarías hablando de 60 millones de dólares en una sola temporada, sólo por concepto de fines de semana de carrera”, dijo. Todo el movimiento en redes sociales se tradujo en 33 millones de dólares del nacional por 30 millones de dólares del bicampeón. Para este 2023 la situación se ha repetido en algunas carreras, por ejemplo, en Miami con Pérez a la cabeza: 18 publicaciones, 35 millones 20 mil 939 de impresiones, y un valor social de un millón 208 mil 564 dólares.