El periodista Jaime Barrera calificó como “una advertencia” la retención de la que fue víctima en su natal Guadalajara.
Detalló que el 11 de marzo salía de su programa de radio cuando “las fauces de la delincuencia” lo atraparon y mantuvieron retenido por casi 36 horas.
“Estuve en cautiverio con los ojos vendados, con las manos atadas, hincado en un sitio en donde no veías, y luego acostado con un poco de agua. Me decían que si quería cenar algo pero no te da hambre, y luego me llevaron a otro sitio y me dejan en la entrada del municipio de Magdalena, ahí yo pido ayuda”, narró en entrevista para Radio Fórmula.
Descartó el secuestro “porque no pidieron rescate”, si bien expuso que fue a propósito “de lo que yo escribo, de lo que yo digo”.
“Fue una odisea larga, terrible, pero afortunadamente terminó bien”, señaló.
Jaime Barrera agradeció al gremio periodístico la cobertura que hicieron de su desaparición y la exigencia de su aparición con vida, pues afirmó, eso ayudó a que lo dejaran libre.
Sin embargo, indicó que lo ocurrido “vuelve a perturbar” al gremio periodístico, resaltando aún más la injerencia del crimen organizado de cara a las elecciones presidenciales del 2 de junio.
“Uno queda medio tocado… Quedan advertencias (como) ‘hoy te vas, pero sabemos dónde vives, dónde estás, tu familia’”, confesó.
El periodista mencionó que ya había sufrido incidentes por su labor periodística, pero que será hasta esta ocasión que buscará apegarse al Mecanismo de Protección para Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas federal.
Con información de Radio Fórmula