Ford Motor reportó pérdidas durante el último trimestre de 2016, las cuales se generaron por amortizaciones luego de anunciar la cancelación de los planes para construir una nueva planta de 1.6 mil millones de dólares en San Luis Potosí, así como por pagos de pensiones, por lo que prevé una baja de sus ganancias en 2017.
La automotriz anunció la pérdida de 783 millones de dólares durante el cuarto trimestre del año pasado, dentro de los cuales se incluyen 200 millones de dólares relacionados con la cancelación de la construcción de una planta en México.
Por otra parte, Ford indicó que ahorraría 500 millones de dólares por la producción de vehículos más pequeños en otra fábrica en México. Las previsiones de la automotriz contrastan con las estimaciones de General Motors y Fiat Chrysler.
A principios de 2017, Ford anunció la cancelación de sus planes para construir una nueva planta de 1.6 mil millones de dólares en San Luis Potosí, para crear en su lugar un centro de innovación y manufactura en Michigan, con una inversión de 700 millones de dólares, donde se crearán 700 nuevos empleos en un “voto de confianza” a Donald Trump.
El CEO de Ford, Mark Fields, dijo que la inversión es un “voto de confianza” en el entorno favorable para los negocios que el presidente electo Donald Trump está creando. Sin embargo, destacó que Ford no hizo ningún tipo de trato especial con Trump