La Reserva Federal bajó los tipos de interés en un cuarto de punto porcentual en una decisión muy polémica, lo que sugiere que los funcionarios podrían mostrarse reacios a reducir mucho más los costes de endeudamiento a menos que el mercado laboral se debilite considerablemente.
La decisión de recortar por tercera reunión consecutiva desplazó los tipos de interés a un nuevo rango del 3,5 por ciento al 3,75 por ciento. Fue la cuarta votación consecutiva que no contó con el respaldo de todos los miembros del Comité Federal de Mercado Abierto, compuesto por 12 miembros, lo que subraya lo fracturado que está el banco central mientras lidia con el riesgo tanto de un aumento del desempleo como de una inflación persistente.
Stephen I. Miran, miembro de la Junta de Gobernadores, se opuso a la decisión a favor de una reducción mayor, de medio punto. Es la tercera reunión consecutiva en la que el señor Miran, a quien el presidente Trump le había elegido para unirse a la Fed en septiembre y está en una licencia temporal de la Casa Blanca, ha disentido.
Jeffrey R. Schmid, presidente del Banco de la Reserva Federal de Kansas City, votó en cambio para que la Fed mantuviera la postura, como hizo en octubre. Esta vez le acompañó Austan D. Goolsbee, presidente de la Reserva Federal de Chicago.
Ese grado de división es raro para el señor Powell, que anteriormente había logrado que sus colegas se movieran como un grupo mayormente cohesionado incluso navegando por un terreno económico complicado. La división interna en la Fed solo ha aumentado la presión sobre el señor Powell, que simultáneamente enfrenta ataques de Trump y de aspirantes que buscan reemplazarlo cuando termine su mandato como presidente en mayo.
Nuevas proyecciones publicadas el miércoles también pusieron de manifiesto la magnitud del desacuerdo que afecta a la Fed. El “dot plot”, un gráfico que agrega lo que los 19 funcionarios prevén que ocurrirá con los costes de endeudamiento en los próximos años, mostró que otros cuatro responsables políticos registraron las llamadas disidencias blandas. Esos funcionarios presentaron una previsión de que los tipos de interés habrían terminado el año en el nivel anterior del 3,75 % frente al 4 %, lo que indica su oposición no oficial a un recorte.





