- Presentaron expertos queretanos el libro de Carlos Almada
- Promueve la comunicadora Inés Sainz a Lele en el Mundial 2022
- Ya recordó Paulina Aguado a la decana del PAN Natalia Carrillo
- Que quieren que marche López Obrador… pero para su rancho
Cuartelazo.
A 112 años del inicio de la Revolución Mexicana un día sí y otro también nos visitan los fantasmas de la violencia, el enojo y la confrontación nacional provocada por el presidente López Obrador, coincidieron reconocidos expertos en la presentación del libro de Carlos Almada, que reescribe hechos fundamentales del golpe de estado de febrero de 1913.
Reunidos la noche del viernes en el Museo Regional de Querétaro, con la presencia de Mara Madero Vega, descendiente directa de Francisco I. Madero, los queretanos pudimos escuchar la valoración de la historiadora Blanca Gutiérrez Grajeda, ex directora de la Facultad de Filosofía de la UAQ, sobre “Un Samurái en la Revolución Mexicana”, que obligará a un reajuste en los estudios historiográficos sobre el primer movimiento social del siglo XX en el mundo
“Yo creía que estaba dicho todo y me equivoqué” aceptó la autora de “Historia de una usurpación”, entre otros libros, al referirse a la obra que revela hechos y documentos sobre la decena trágica, en especial la heroica defensa del diplomático japonés Horiguchi Kumaichi al salvar la vida de la esposa, padres y dos hermanas del mártir de la democracia.
Afirmó la doctora Gutiérrez Grajeda que siempre los escritores escogen los temas, pero en este caso la historia escogió al autor, los astros se alinearon y Carlos Almada no tuvo ninguna posibilidad de eludirlo, al casarse con la sobrina nieta de Madero y ser nombrado embajador en Japón.
Por su parte Francisco Meyer Cosío, maestro de la UAQ, hizo una extensa revisión del contexto mundial del siglo XIX, que no fue fácil para nadie, y derivó en la revolución mexicana, reflexionando sobre el error de considerar retrógradas a los conservadores , cuando se trata de conservar lo valioso y cambiar lo necesario.
En el contexto actual, con tanto enojo y confrontación social, debe recordarse que pasar a la acción armada es la peor de las soluciones y todos salen perdiendo.
El ex gobernador Mariano Palacios Alcocer elogió la obra de Carlos Almada y su prosa rica, didáctica y generosa que urga en más de seis generaciones de japoneses y ofrece una nueva fuente de información para la reconstrucción histórica, al revelar detalles de la defensa de la familia del presidente Madero por parte del diplomático Horiguchi Kumaichi, descendiente de samuráis y que debe leerse para advertir similitudes y lecciones en la mutifuncionalidad del México moderno.
A su tiempo el autor, que define a Madero más como reformador que como revolucionario, agradeció las opiniones de los panelistas y reconoció que el libro lo eligió al casarse con la queretana Mara Madero Vega, con quien contrajo nupcias por amor y no por razones historiográficas.
Mara es nieta de Julio Madero, hermano de Francisco I. Madero,
Finalmente recordó Almada a la sanjuanense Sara Pérez como figura de gran calado en la revolución mexicana, ignorada por nuestra tradición patriarcal y a la que todos le debemos mucho.
Por cierto, en la velada coordinada por Juan Antonio Isla Estrada, verdaderamente rica y disfrutada por un nutrido grupo de queretanos entre los que se encontraba el también ex gobernador Enrique Burgos García, intervino Dora Guzmán, directora de una película que se está filmando para reivindicar el papel de Sara Pérez de Madero, interpretada por la actriz Ofelia Medina.
Magnífico colofón para la presentación de un texto que reabre y reescribe los hechos de la decena trágica.
El libro está a la venta en las librerías Gandhi.
Se la recomiendo mucho.
-OÍDO EN EL 1810-
Lele.
La popular artesanía de las indígenas amealcenses anda en Qatar de la mano de la conductora Inés Sainz, bajo los auspicios del gobierno estatal y la encomienda de la titular de Turismo Adriana Vega Vázquez Mellado, a quien –por cierto- algunos amigos de la anterior secretaria atacan en las benditas redes sociales.
Doy fe.
-¡PREEEPAREN!-
Madero.
Que un error histórico es el de identificar como Indalecio la I del segundo nombre de pila del héroe, cuando en realidad se llamó Francisco Ignacio.
Nuestro director general recuerda que don Emilio Nassar, renovador de la radiodifusión queretana en los años 60, perdió el premio del programa de los 64 mil pesos, conducido por Pedro Ferriz Santacruz, al sostener que el mártir era Francisco Ignacio, cuando hasta en los libros de texto aparecía como Indalecio y algunos todavía lo siguen creyendo.
El incidente, afortunado, marcó el ingreso de Nassar a los medios electrónicos, al reivindicar su triunfo, convirtiéndose en asesor del programa, pero esa es otra historia.
Para el Tablero.
-¡AAAPUNTEN!-
Nuevos tiempos.
Hablando de libros, la diputada federal Paulina Aguado Romero publicó en sus redes una fotografía en la que muestra un volumen de “Memorias de la fundación, crecimiento y consolidación del PAN en Querétaro” en la que aparece entre los pioneros su abuelo Jesús Romero Santoyo.
La obra es de la investigadora Natalia Carrillo García, ignorada durante todo el sexenio pasado, en donde Paulina fue secretaria de Cultura y no recuerdo la haya mencionado nunca.
Más vale tarde.
-¡FUEGO!-
Ingeniosos.
Que muchos desean el buen fin… pero del sexenio de AMLO.
Y que celebran que marche, pero a su rancho,
¡Porca miseria!