Los negocios de la Cámara Nacional de Comercio en Pequeño (CANACOPE) de Querétaro tienen una expectativa de derrama económica de 385 millones de pesos, para la celebración de Día de Muertos.
El presidente de este organismo, Sergio Martínez de León, consideró que estas festividades podrían abonar a incrementar en un 10 por ciento la derrama obtenida del año 2022, de 350 millones de pesos; y aún más la de 2021, de 300 millones; tomando en cuenta que muchos comercios aún superaban los estragos de la pandemia por COVID-19.
“Nosotros estamos yéndonos a 385 millones; esperamos que podamos superar con un buen margen, llegando probablemente a los 400 millones, pero vamos con pronósticos reservados. Los artículos religiosos, las florerías y el comercio en general se verán beneficiados”, puntualizó.
Sergio Martínez aseguró que este escenario propiciaría un diagnóstico de la situación del comercio en pequeño frente a la recuperación tras la pandemia, pues a tres años de esta contingencia mundial, se podría llegar a un 90 por ciento de reactivación, como en la normalidad de 2019.
“Esta derrama para nosotros es un gran indicador de que vamos a tener un gran diciembre, muy cercano a lo que tuvimos en el 2019; y también vamos a empezar a hacer la valoración de cómo van todos nuestros giros en temas de recuperación, ya se están haciendo algunos estudios y encuestas”, afirmó.
Negocios advierten riesgos de pérdidas por reforma laboral
El presidente de CANACOPE Querétaro señaló que una de las principales preocupaciones de este sector durante el encuentro de cámaras afiliadas a la Confederación Nacional de Cámaras de Comercio (CONCANACO), la semana pasada, fue la reforma que plantea la reducción de las jornadas laborales.
Hizo un llamado a las cámaras locales para sumarse a un pronunciamiento conjunto que proponga una aplicación paulatina de esta medida; pues consideró que los negocios se verían afectados en un 20 por ciento de sus ganancias, por la contratación de más personal y la posible baja en la productividad.
“Nosotros tenemos un estimado de aproximadamente un 20 por ciento que se va a poder derivar un aumento en los costos, porque tenemos que emplear a más personas para poder cubrir esas 8 horas que van a reducir, y eso obviamente va a alterar y va a hacer mucho más cara la operación. Estamos hablando de que podría ser un gran golpe para la economía; y los mismos trabajadores pueden ser vulnerables a que se atropellen sus derechos”, mencionó.