Aunque México recurre al endeudamiento esto no ayuda a impulsar la economía; sin embargo, no se vislumbra que esta tendencia vaya a cambiar este año, advierte el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).
“Observamos que con lo que se está gastando y con el crecimiento observado, la deuda parece no estar impulsando el crecimiento económico.
“El endeudamiento sirve para mejorar la productividad, el capital humano, las capacidades del País para producir más, pero lo que vemos es que seguimos por debajo del (crecimiento económico del) 2005. Por lo tanto, el endeudamiento no está sirviendo para eso”, aseguró Ricardo Cantú, director general adjunto de Operaciones y Fortalecimiento Institucional del CIEP.
El País se ha endeudado en los últimos años, expuso el especialista, pero ha sido principalmente para cubrir el gasto corriente y no para desarrollar una infraestructura que genere mayor capacidad productiva.
Recordó que desde 2005 y hasta 2023, la productividad ha tenido una caída promedio anual de 0.16 por ciento.
“Eso significa que tenemos una década de endeudamiento que no se ha visto reflejado en un aumento en la capacidad de generar mayores ingresos”, expone un análisis sobre la sostenibilidad de la deuda del País del CIEP.
Para este 2024, último año del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador, se prevé un endeudamiento histórico equivalente a 5.4 por ciento del PIB, el cual será utilizado bajo el paradigma de impulsar la economía con mayor gasto público.
Sin embargo, el crecimiento económico rondaría entre 2.5 y 3.5 por ciento en este año y la productividad laboral se ubicaría en 0.3 por ciento, un rango bajo, sostuvo Cantú.
Eso significa que la tendencia de endeudarse sin que eso genere mayor productividad no cambiaría, advirtió el experto.
Resaltó que parte importante del endeudamiento de este año se destinará al pago del costo de la deuda o al pago de intereses de la misma.
Dicho costo ascenderá a un billón 263 mil millones de pesos, 11.8 por ciento mayor al que se aprobó para 2023, de acuerdo con el Presupuesto de Egresos de la Federación 2024.
El director sostuvo que mantener esta tendencia de deuda representará grandes retos para las futuras generaciones y Administraciones federales del País.
“A las nuevas generaciones vamos a tener que cobrarles más impuestos para pagar una deuda que adquirimos antes”, alertó.
Frente a este escenario, y considerando la disminución de ingresos petroleros, el CIEP destaca que es crucial desarrollar estrategias para diversificar las fuentes de ingreso del Gobierno, mejorando la eficiencia en el gasto público.