En Querétaro, Parroquia de la Resurrección

• La dirige Jesús Galván en el templo de San Roque
• Presume Romero al estado como “oasis político”
• Arturo Maximiliano promueve legalizar el aborto
• Historietario: Mario Arturo, queretano, poeta y loco

El más acá.

Es el Día de Muertos, fe, memoria y esperanza que dan vida a nuestra cultura. Noviembre llega a Querétaro y  México envuelto en color, aroma y gratitud. Las flores de cempasúchil iluminan los altares, las velas guían el camino de los recuerdos y las familias se reúnen para rezar, compartir y recordar. En el corazón de estas tradiciones, la Iglesia Católica acompaña al pueblo mexicano con una profunda verdad de fe: la vida no termina con la muerte, sino que se transforma en plenitud junto a Dios.

La fe que da sentido a la tradición.

Eso me dice el padre Jesús Galván Martínez titular de una parroquia que casi nadie conoce por su nombre: Parroquia de la Resurrección, cuyo templo principal es el de San Roque, ubicado en la Avenida San Roque 35.

Él, frente a un café en la Plaza Cibeles del BBQ, nos recuerda que cada uno y dos de noviembre, la Iglesia celebra la Solemnidad de Todos los Santos y la Conmemoración de los Fieles Difuntos.

En Querétaro, las parroquias se llenan de oración y esperanza: se celebran misas especiales, se colocan altares con flores, velas e incienso, y se organizan procesiones hacia los cementerios para rezar por quienes han partido.

El Catecismo de la Iglesia Católica enseña, dice el padre Galván, que “la Iglesia honra la memoria de los difuntos y ofrece oraciones por ellos, para que, purificados, puedan alcanzar la visión de Dios” (CEC 1032). Por eso, cada rezo, cada flor y cada vela son signos de amor que se elevan al cielo.

Fe que se encarna en la cultura

En Querétaro, la fe y la cultura se abrazan de modo singular. En la capital, el Festival del Día de Muertos llena las calles del centro histórico con música, arte y oración. En Tequisquiapan, los altares y las ofrendas se convierten en espacios de encuentro, donde la gastronomía y la música popular se unen al recuerdo de los seres queridos.

Estas expresiones culturales no se oponen a la fe; más bien, la enriquecen, dice quien ha estado tres años al frente de la Parroquia de la Resurrección. Reflejan el alma de un pueblo que no teme a la muerte porque cree en la vida eterna, y que transforma el duelo en esperanza. En ellas se conserva una profunda devoción familiar, un sentido de comunidad y una espiritualidad que reconoce que el amor nunca muere.

Tiene razón.

-BLANCAS Y NEGRAS-

Burrada.

La propuesta abortista del expanista y ahora morenista Arturo Maximiliano, que como te dice una cosa te dice la otra, no prosperó ayer en la comisión de justicia presidida por Guillermo Vega, La iniciativa será llevada al pleno.

Siii, ya sé, el aborto ya fue aprobado en la mayoría de los estados, pero Querétaro es Querétaro y ese tema no pasa. Por cierto ¿qué piensa la queretanísima jueza de jueces Celia Maya al respecto?  Es pregunta que no responderá.

Mejor imposible. El doctor Augusto Isla recibirá este año el premio Hugo Gutiérrez Vega por sus elevados méritos culturales y académicos. Su candidatura fue avalada por todos los directores de la Facultad de Derecho y la mayoría de exrectores vivientes.

Sin embargo, como en la UAQ los asuntos culturales suelen convertirse en políticos al parecer van a declarar un empate, como si fuera partido del Querétaro con el Atlas. Por cosas como esas se fue Hugo de Querétaro.

Vino este jueves el presidente nacional del PAN, Jorge Romero. Querétaro, reconoció, es un oasis y por eso las encuestas y hasta la dirigencia de Morena reconocen ventaja en la carrera por la gubernatura del Estado. Ahí están Felifer Macías, Luis Nava, Agustín Dorantes, Chepe Guerrero y Marco del Prete.

Y sí. Nomás que se pongan de acuerdo en el candidato para no repetir el numerito del 2009, cuando algunos que hoy son naranjas jugaron las contras y perdieron cuando llevaban más de 20 puntos de ventaja.

En la 4T lo saben, lo saben, a pesar de tener una buena baraja de aspirantes encabezada por Santiago Nieto, pero en la que también figuran Gilberto Herrera, Huis Humberto Fernández, Ricardo Astudillo y, si el tema es de género, Beatriz Robles.

Y como para la gubernatura ya es complicado agregar más nombres, hoy el juego se ha extendido a los posibles aspirantes a las presidencias municipales, especialmente a la de Querétaro capital.

Por el PAN, descartando a Felifer, suenan Nava (que no quiere), Tania Palacios que ahí está, Cuanalo que va encamionado, Del Prete con sus dieces en economía y hasta Dorantes que busca la gubernatura.

En la 4T la lista es más difusa. Maximiliano (otra vez), Sinuhé, Beatriz,  Ulises, Andrea y en una de esas reviven a Chema, que ya se anda reivindicando.

La política es así.

-LA FRASE DE LA SEMANA-

Advertencia.

La prioridad es evitar excesos de confianza: Mauricio Kuri a los panistas que ya se ven ganadores por la encuesta de La Jornada.

Remember 2009.

-EL HISTORIETARIO-

De memoria.

Amoroso y renegado, ingenioso y prolífico. Así era El Poeta de La Cruz, Mario Arturo, así sin los apellidos Ramos Muñoz. Escribía canciones para ahorrarse el siquiatra y se repartió la vida entre hacer libros sobre los compositores e intérpretes mexicanos, dirigir un periódico cultural en Mocorito, Sinaloa y visitar a sus muertas en Querétaro, antes de convertirse en cenizas y ser regado en la Rumorosa para transformarse en sólo un rumor.

Poeta, porque en Querétaro eres poeta o loco (lo cito) y él era las dos cosas, el autor de más de 400 letras grabadas por los principales solistas mexicanos, como Lola Beltrán, José José, Vicky Carr, Emmanuel, Marco Antonio Muñiz, Luis Miguel, Manoella Torres y Gualberto Castro entre otros, es reconocido por “Hasta que vuelvas”, de la que hay un centenar de versiones, la última, de Luis Miguel.

Fundó talleres de poesía en Sinaloa, Baja California, Distrito Federal y por supuesto en Querétaro, obteniendo premios en los festivales OTI en 1973 y 1974, con segundos lugares por “Te amo” interpretada por Gualberto Castro y “Comunicación”, cantada por María Medina. Fue autor del lema de la Universidad Autónoma Metropolitana, “Casa abierta al tiempo”.

Entre amores y versos, Mario Arturo –nacido en el barrio de La Cruz en 1949- se dio tiempo para publicar Rutinero, La Letra Cantada y un polémico cancionero “Cien corridos-Alma de la Canción Mexicana” en el que incluyó corridos de narcotraficantes, pero también investigaciones sobre Agustín Lara, Álvaro Carrillo, Pedro Vargas y Cuco Sánchez.

Su vena poética está expresada en los libros ya mencionados pero también en Las Canciones Queretanas y De Viajes y Viejas, con dedicatoria para los grandes amores de su vida: La Tía Lola, su mamá Esperanza y Lourdes, compañera de toda la vida.

“El Gato” Ramos, como lo identificaban solamente sus compañeros de generación, fue un joven rebelde y peleonero, internado en el Velasco, colegio militarizado de época, para disciplinarlo, sin mayor éxito.

En cuanto pudo escapó a Sinaloa, en donde nació Dante y remató años después en la Ciudad de México, para hacer canciones y a París, su segundo hijo, además de emprender una larga lucha gremial por la democratización de la Sociedad de Autores y Compositores, de la que fue directivo y después disidente.

Aunque siempre se quejaba de los queretanos e ironizaba con “el error histórico de haber fusilado a Maximiliano, porque sino todos seríamos marqueses o duques”, Mario Arturo era adicto a su ciudad, en la que organizó festivales de canto, como el festival de La Canción Queretana.

Se ufanaba de ser un mexicano nacido en Querétaro y juzgaba la queretanidad un trauma de los queretanos, convencidos de que El Cimatario es la frontera del mundo. Como se quiera, tuvo aquí sus raíces, pero no su domicilio. Viajero incansable pasó por 82 países y solo venía a ver a sus muertos, y a sus vivos.

Trabajó en  Mocorito, Sinaloa, un pueblo minero, la tierra de los que él llama Los Rolling Stone de México, Los Tigres del Norte, en donde editó La Voz del Norte, el único periódico cultural de México, porque –aseguraba- en el país hay suplementos culturales, pero no periódicos culturales. Ese órgano de difusión creado en 1901 está en su cuarta etapa, Curiosamente la segunda fue encabezada por otros  dos queretanos: Heriberto Frías y Juan B. Delgado.

Reconocía Mario Arturo que de La Estación al Cerro del Cimatario le perseguía el huele de noche del Cerro de las Campanas y regresaba a esta ciudad para ir al Templo de La Cruz por agua bendita, y partir a Culiacán, para pasar por Tijuana y Tecate, y llegar a la Rumorosa, en  donde sus cenizas fueron vertidas por Dante para cumplir su última voluntad: ser solo un rumor. El Poeta de la Cruz se ufanaba de ser escritor desde su origen, porque en Querétaro, o somos poetas o somos locos, y él era las dos cosas. Hace un año lo despedimos en el Museo Regional de Querétaro.

¡Hasta que vuelva!   

-JUGADA FINAL-

Para su calaverita.

Al diputado local, expanista y ahora morenista, Arturo Maximiliano García que le hace al vivo apostando a la muerte, un ¡Jaque Mate al Pastor!