El historiador Enrique Krauze, incontables estigmatizado en las mañaneras presidenciales (le han dicho intelectual orgánico, neoliberal, etc.) ha recibido este miércoles en el Monasterio de San Lorenzo de El Escorial el Premio de Historia Órdenes Españolas, un galardón internacional promovido por las Órdenes de Santiago, Calatrava, Alcántara y Montesa, en un acto que ha estado presidido por el Rey Felipe VI.
El Premio de Historia Órdenes Españolas es un galardón internacional promovido por las Órdenes de Santiago, Calatrava, Alcántara y Montesa.
Su objetivo es distinguir al investigador de Historia cuyo trabajo haya alcanzado general reconocimiento por la importancia de sus estudios, el rigor de su documentación y el alcance de sus conclusiones, y que alguna parte de su obra esté relacionada con lo hispánico y su proyección en el mundo.
El Premio nació en el año 2017, con el deseo de convertirse en una referencia internacional de la ciencia histórica. En él concurren varios atributos que lo hacen único y que transmiten la excelencia con la que ha sido concebido: su carácter internacional, distinguir toda una trayectoria investigadora, la altura científica de las entidades que proponen candidatos y de los miembros del Jurado, y la dotación económica de 60.000 euros.
El Premio es gestionado por la FUNDACIÓN ÓRDENES ESPAÑOLAS, que a su vez desarrolla numerosas actividades sociales y culturales de las Órdenes Españolas.
La agencia EFE refiere el acontecimiento en los siguientes términos:
“…Kauze apostó este miércoles por que en Latinoamérica y España imperen siempre la democracia, la ley y la libertad sobre los fanatismos de la identidad, tras recoger de manos de Felipe VI el III Premio de Historia Órdenes Españolas.
Krauze recibió este galardón, que reconoce la trayectoria de autores cuya obra esté relacionada con lo hispánico y su proyección en el mundo, en un acto celebrado en el madrileño Monasterio de San Lorenzo de El Escorial, presidido por el rey de España, quien señaló que este premio quiere impulsar el mejor conocimiento de la historia «con una visión abierta y universal».
Felipe VI destacó las palabras «lógicas y claras» de Krauze, que tanto contribuyen «y reflejan esa cercanía de México y España y todo lo que significa nuestra herencia común».
Es tiempo de que desde Palacio Nacional ya se diga que también para periodistas, intelectuales, historiadores y medios de comunicación, también apuestan por la estrategia conciliadora de abrazos y no balazos.
Felicitaciones a Enrique Krauze por su merecido galardón.