Hubo mucho colorido y pocas gente en nuestra Plaza de Armas la noche del miércoles, al impedirse el acceso al público con la justificación de la pandemia.En ese desolado panorama el gobernador Francisco Domínguez Servién, acompañado de su familia y los más cercanos colaboradores vitoreó a los próceres de la Independencia fraguada en la Casa de la Corregidora. Además en esta su última ceremonia de 15
de septiembre, incluyó a los trabajadores del sector salud que arriesgan la vida para luchar contra el Covid 19 y proteger a los queretanos. Muy merecido.