De nuestra frágil democracia nada queda.
Hemos dejado de ser una república. El colapso de la división de poderes es evidente. La transición hacia el autoritarismo ha sido lenta pero implacable. La 4T ha destruido cuanto ha podido: los organismos autónomos; abatido el seguro popular, restringido el juicio de amparo hasta volverlo cenizas.
El señor López Obrador ha puesto en manos castrenses todos sus antojos: aduanas, las llamadas “megaobras” todas un fraude, en el abismo del proceso proyectos aeroportuarios. Todo en aras de combatir la corrupción, con esa bandera sedujo a las masas. Exhibiendo aquél pañuelo blanco decretó que las corruptelas habían pasado a la historia.
Pobres aquellos que le creyeron, pues que la corrupción navega viento en popa. O si no, no, que hablen los hijos Adán Augusto y su Barredora, el Dr. Ricardo Monreal y su dinastía; Zacatecas es suya. Y más de una veintena cercanos al tabasqueño.
¿Qué ha hecho su sucesora, la poco feminista Dra. Claudia Sheinbaum? Guardar silencio. Todo está bien. Este es el país de las maravillas. Con deudas escandalosamente millonarias, pero próspero. Y nosotros cómplices, pues que, como dice el refrán, ‘calladitos nos vemos más bonitos’. Y cuando las multitudes alzan la voz, ¡cuidado!.
Pues el espionaje se expande como un reguero de pólvora.
La crisis es alarmante. Tal parece que la presidenta se ve acorralada. Impotente. A menudo, desconcentrada y tanto obvia: “Si se consume menos luz, baja el costo”. Pero esto es lo de menos, la violencia crece, ahí el asesinato de Carlos Manzo; la cantidad de desapariciones es aterradora: mas las cien mil madres buscadoras que encuentran cadáveres por doquier. Todo lo minimiza. La presidenta no ha entendido que la marcha del 15 de noviembre, no es un repudio personal, sino como mandatoria. Culpa a antecesores del combate a la delincuencia organizada. ¿Ya olvidó la consigna de su mentor? ¿Abrazos no balazos? La cuarta transformación es una ruina. Por fortuna su perdurabilidad es endeble. Sheinbaum se considera fuerte. ¿Pero ese sentimiento no puede leerse como señal de debilidad? El karma de su soberbia pronto caerá sobre su cabeza. Las encuestas registran ya un rechazo del 53%. Por algo será. Colofón: Tomás Moro decía: “Si aceptas injusticias en silencio, te vuelves cómplice de ellas.
El que no defiende la verdad… termina viviendo la mentira de otros”.
