EL JICOTE
Lo que brinca del artículo de Nexos: “Anuario de la Corrupción2019”, es que los autores incluyen en el texto casos que no son atribuibles a la 4T, como podría ser la investigación de la desviación del dinero de la Cooperativa Cruz Azul, está bien que el equipo tiene tan mala suerte, que si compra una funeraria la gente se haría inmortal, pero eso no se le puede atribuir al gobierno. Ni tampoco se puede asociar a López Obrador con los excesos del gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez “El Bronco”, en su campaña para la presidencia de la República. Si es posible que el Presidente haya movido la cuna de la Ley Bonilla, ley que pretendía alargar el tiempo de la gubernatura, lo que le pareció a la Secretaria de Gobernación Olga Sánchez Cordero perfectamente legal. No dudo ni tantito que López Obrador también le haya susurrado a los diputados del Congreso de Tabasco la llamada Ley Garrote, por medio de la cual se criminaliza los bloqueos o acciones contra las obras públicas, que algo sabe del tema el Presidente cuando era opositor. En fin, no todo exceso de poder puede considerarse corrupción. Ejemplo de este delito y más escandaloso porque el Presidente había dicho que “el buen juez por la casa empieza”, fue la omisión en su declaración de la Secretaria de Gobernación de un departamento en Houston. Pecata minuta, a cualquiera se le olvida que tiene un departamento en el extranjero de medio millón de dólares. Grave acto de corrupción fue la compra entre quinientas y mil pipas, lo que se hizo por adjudicación directa y violando los procedimientos de Compranet; la presidencia adujo que se hizo sin licitación por tratarse de una emergencia. Las pipas llegaron dos meses después de que se superó el problema del desabasto. Siguen faltando mecanismos preventivos para evitar la contratación de empresas fantasma, se encontró que siete dependencias del gobierno federal habían firmado 16 contratos con siete empresas fantasma por una cantidad superior a los cien millones de pesos. No se ha informado que se hayan fincado responsabilidades. Algo sumamente positivo de la 4T es eliminar las condonaciones de impuestos a contribuyentes ricos. ¡Felicidades! Carlos Salinas reformó el Código Penal para no considerar grave el robo de bienes públicos. No lo mencionan los autores del artículo, pero creo que la mayor aportación de López Obrador a la lucha contra la corrupción, ha sido abrogar este nefasto precedente e impulsar un cambio legislativo para convertir a la corrupción en un delito grave. No obstante, la postura anticorrupción del Presidente tiene un hoyo negro que le quita el aura emblemática de su gobierno. El peje por la boca muere, no es posible que se enarbole la independencia y autonomía de las autoridades de investigación y sanción de la corrupción y al mismo tiempo se pregone que antes de actuar lo consultan con el Presidente. La lucha contra la corrupción se convierte, no en una política sino un arma contra los enemigos. Siempre he creído que el PRI no es un partido sino un genoma de la clase política, el PRI mezcla lo contradictorio, lo revolucionario con lo institucional, el Presidente nos pretende vender una independencia y una autonomía, pero bajo su permiso y aprobación. ¿Qué significa esto? El priísmo puesto al día.