EL JICOTE
Cien o más días. El Gobierno de los sobresaltos III
Iniciemos con los grandes aciertos del Presidente López Obrador. El mejor es el aumento de un salario mínimo sin precedente, y que sin duda tuvo previamente una muy buena negociación con la iniciativa privada. Después algo sobre lo que ya hemos ampliamente aplaudido, el decreto que cambia el destino de las Islas Marías, deja de ser un centro penitenciario y se convierte en un centro de investigación ecológica. Magnífico también que se haya eliminado lo que primero había anunciado López Obrador, hacerlas también un centro turístico. Son islas que no soportarían visitas masivas de turistas que tienen vocación depredadora.
Medida de gran popularidad es la cancelación de las pensiones millonarias de los ex presidentes. Es de destacar también la recuperación de los Pinos para integrarlos al Bosque de Chapultepec. No podría dejar de mencionar la eliminación de seguros médicos a funcionarios y legisladores. Medida que obligará a la superación de los servicios médicos públicos. Ahora sí van a saber la alta burocracia y los legisladores lo que son las esperas en el ISSSTE. Hay gente que se muere haciendo antesala.
En el aspecto negativo, algo sumamente preocupante. Los nombramientos a modo en el Tribunal Electoral, la titularidad de la Fiscalía General y los ministros de la Corte, el último nombramiento, el de la Ministra Riobóo, esposa del contratista favorito del Presidente, reboza conflicto de intereses y, por lo tanto, un cinismo que se revuelca en el barro del autoritarismo.
Todas son instituciones diseñadas como controladoras, como árbitros, si se les arruina su independencia se les deja como cascarones inútiles. Los autócratas son impacientes, optan por no cambiar los marcos jurídicos, sino simplemente designan a juzgadores aliados. De órganos de contención del gobierno se convierten en manos armadas del poder. López Obrador utiliza su amplia legitimidad para boicotear la institucionalidad y la legalidad. Nuestra democracia está en grave peligro.