Dwayne Johnson toma un giro serio como el luchador de la UFC Mark Kerr en “The Smashing Machine”, que tuvo su estreno mundial el lunes en el Festival de Cine de Venecia.
“Durante mucho tiempo he querido esto”, afirmó Johnson antes del estreno. “La parte de la transformación era algo que realmente tenía muchas ganas de hacer. He tenido la suerte de tener la carrera que he tenido y hacer las películas que he hecho, pero había una voz dentro de mí, esa pequeña voz, que decía: ¿y si puedo hacer más?”
El actor, conocido principalmente por películas de acción de gran presupuesto y comedias, ya ha comenzado a crear expectativas para un posible Oscar por su transformación en la película de Benny Safdie. Venecia ha servido como plataforma para ganadores recientes del Oscar al mejor actor, desde Brendan Fraser en “The Whale” (“La ballena”) hasta Adrien Brody en “The Brutalist” (“El brutalista”). Al igual que ambas películas, “The Smashing Machine” será estrenada por A24.
“La taquilla en nuestro negocio es muy ruidosa”, comentó Johnson. “Y puede empujarte a una categoría y a un rincón: Este es tu camino, esto es lo que haces, esto es lo que la gente quiere que seas y esto es lo que Hollywood quiere que seas. Y lo entendí e hice esas películas, y me gustaron y fueron divertidas. Y algunas fueron realmente buenas y tuvieron éxito y otras no tanto.”
Pero sentía que tenía más para dar, no para demostrar algo a Hollywood, sino a sí mismo. El impulso para asumir un nuevo desafío vino en parte de su coprotagonista y amiga Emily Blunt, con quien había trabajado previamente en “Jungle Cruise”, y quien lo animó a aprovechar todo lo que había vivido en la vida y ponerlo en su trabajo.
“Cuando te han encasillado en algo, es difícil saber, espera, ¿puedo hacer eso?”, expresó. “A veces se necesita que personas que conoces y amas, como Emily y Benny, te digan que puedes.”








