La sesión Permanente del Congreso de la Unión arrancó con una condena a la agresión del senador priista Alejandro Moreno contra Gerardo Fernández Noroña.
El morenista leyó un pronunciamiento en el que demandó al PRI detener sus acciones violentas y conducirse con institucionalidad a la altura del cargo que ostentan.
Del mismo modo, solicitó a las mesas directivas del Congreso dar seguimiento a las denuncias penales.
“En toda la historia nunca se había agredido a la persona presidenta”, dijo Noroña.
“Es grave que haya sido por un senador y dirigente de un partido político nacional”.
En su intervención, el priista Rubén Moreira recordó la agresión de Noroña contra Porfirio Muñoz Ledo, cuando metieron un caballo a San Lázaro y pusieron barricadas.
“Me dirijo a gente sensata que hay en Morena”, señaló.
Dijo que hay un grupo morenista que le gusta polarizar, distanciar y generar enemigos.
Moreira pidió a Morena trabajar por México y sacar adelante los proyectos.
“Por qué está rodeado de militares el Senado y metieron paramilitares”, cuestionó.
“Que no los arrastre el ego de una persona, esa persona no llegó aquí por sus méritos”.








