Como una entrega del sistema de justicia a los poderes fácticos, incluida la delincuencia organizada, consideró el juez de Distrito Juan Pablo Barrios Olivas la elección popular propuesta en la iniciativa de reforma al poder judicial. Entrevistado por el periódico Plaza de Armas luego de encabezar la marcha de los paristas pertenecientes al circuito de Querétaro, el titular del II Tribunal Federal Laboral de Asuntos Individuales, exigió apertura al diálogo antes de votar “la destrucción del Poder Judicial”.
Con 12 años de servicio en el sistema federal de justicia, los últimos tres como juez en nuestro estado, Barrios Olivas reconoció que la suspensión de actividades impacta a los usuarios y colapsa el trámite de los juicios, pero calificó como falacia argumentativa del presidente López Obrador el celebrar la no liberación de delincuentes.
-El jefe del Ejecutivo no sabe que los asuntos urgentes no se detienen y que se libera a personas cuya culpabilidad no fue demostrada por el ministerio público más allá de cualquier duda razonable, porque todos somos inocentes hasta que se demuestre lo contrario.
Señaló también que el inédito paro iniciado esta semana en la mayoría de los tribunales y juzgados federales del país por los trabajadores y funcionarios tiene como destinatarios no solamente a los mexicanos, sino al exterior, para alertar sobre la amenaza de acabar con el sistema de pesos y contrapesos establecido en la Constitución, dado paso a la construcción de una dictadura.
-Nosotros no somos políticos y consideramos un grave error querer someter a los juzgadores a una elección popular.
Juan Pablo Barrios Oliva, que megáfono en mano, llamó este miércoles en Plaza de Armas a los ciudadanos para impedir la legitimación de un método de elección de jueces populares que responderán a los partidos políticos y a los grupos de poder con decisiones agradables, al margen de criterios jurídicos.
Igualmente advirtió que es fácil encender a la opinión pública con juicios sumarios como los emitidos por el presidente Andrés Manuel López Obrador en su Mañanera para descalificar a los integrantes del Poder Judicial Federal.
-Son actos injerencistas para destruir a la institución y prescindir de jueces y magistrados cercanos a la edad de retiro (75 años) que permanecen en servicio por su lucidez y compromiso social.
Por último manifestó que el paro continuará indefinidamente y denunció la contradicción presidencial de calificar de corruptos a los actuales ministros, magistrados y jueces, y luego decir que podrán participar en la elección popular y en su absurda tómbola.