En la semana pasada se dieron varios eventos significativos, como el Día Mundial de la Tierra (22 de abril) fecha que conmemora Naciones Unidas, aunque lo significativo de este día consiste en lograr el objetivo de concientizar a la humanidad sobre los problemas de la superpoblación, la contaminación y la importancia de la conservación de la biodiversidad.
Y justo el 22 de abril de 1970, tuvo lugar la primera de muchas manifestaciones a favor de la causa. Dicho día fue acompañado de la movilización ciudadana, que contó con la participación de más de 2.000 universidades, 10.000 escuelas de primaria y secundaria, así como centenares de comunidades diferentes. La movilización generó una amplia presión social que tuvo ciertos resultados tales como la creación de la Agencia de Protección Ambiental del Gobierno de Estados Unidos, asimismo, en 1972 se celebró la primera conferencia internacional sobre medio ambiente en Estocolmo, a la cual se apodó “La Cumbre de la Tierra”. Pero hoy en día se continua conmemorando, pero esta ausente la movilización social.
Y en el 20° aniversario se sumaron 14 países a la reivindicación de la protección del medio ambiente y se dieron amplias movilizaciones como en Francia, donde una gran multitud creo una cadena humana a lo largo del río Loira, mientras en Italia salieron a la calle cerca de unas 5.000 personas que bloquearon las principales autovías del país, en señal de protesta contra la contaminación emitida por los vehículos. Y acá en el continente americano se registraron movilizaciones como la de Haití. En tanto en Jordania, protestaron alrededor de 10.000 estudiantes, pero en Tokio, tuvo lugar la concentración más amplia de casi 35.000 ambientalistas que se reunieron en la Isla de los Sueños para iniciar un proyecto que establecería allí una gran planta de reciclaje.
Y para este año 2023, el Día de la Tierra contó con el lema “Invertir en nuestro planeta”. Con ello, las Naciones Unidas perseguían implicar, no solo a gobiernos y empresas, sino a todos los ciudadanos en el trabajo por la defensa, cuidado y protección del medio ambiente. El objetivo se centró en conseguir un esfuerzo colectivo que permita conservar un planeta verde para las futuras generaciones.
Por otra parte, otros de los eventos, se dio lugar en el Parque Joya La Barreta, en donde un poco más de un centenar de ciudadanos acudieron al arranque de la semana internacional de cielos oscuros convocado por Astronite y el Instituto de
Ecología y Cambio Climático del municipio, en el cual, se informó sobre el proceso de certificación como el Primer Parque Urbano (en todo el país) como un espacio libre de contaminación lumínica que busca reducir la contaminación lumínica, mitigar los impactos negativos lumínicos en la flora, fauna y ecosistemas y lograr una buena observación astronómica.
En el evento se instalaron tres telescopios profesionales que permitirían la observación de la luna y otros planetas, para los asistentes, que tuvieron que hacer fila. Pero además, se sumo un dueto de guitarra acústica y Sax que amenizaron el atardecer y a los ciudadanos que además de concurrir en el evento, acamparían en el sitio.
El evento contribuyo a concientizar sobre el valor ambiental de este Parque Urbano (con 245 has.) que aporta funciones y servicios ecosistémicos como la captura de carbono con 30 mil toneladas de CO2e, producción de oxígeno, remoción de contaminantes, la conservación de la biodiversidad de especies nativas y la infiltración de agua a los acuíferos (el Parque es una zona estratégica para la infiltración), además de la belleza escénica natural del sitio y su uso recreativo para los ciudadanos. Y se recordó que, en este año, el Parque cumplirá sus primeros 20 años en el mes de septiembre.
Y por último, también se llevo a cabo la presentación del libro titulado “Pautas para la Regulación Hídrica desde los Enfoques de Derechos Humanos y Sustentabilidad”, editado y publicado por la Universidad Autónoma de Querétaro, que desde la Presentación del libro, a cargo de la propia Rectora, se advierte que “La crisis hídrica que vivimos no es, ni de cerca, la que viviremos y la que vivirán las nuevas generaciones. Si no actuamos ahora, irremediablemente llegará el día en que no se cuente con la disponibilidad de agua, iniciará la restricción y el racionamiento, se especulará y se encarecerá el servicio de distribución, el agua potable será cada vez más escasa.”
Así mismo, desde la Introducción se señala que el objetivo que se busca con esta obra es “…proponer una serie de pautas necesarias para la gestión integral del agua, que surgen desde el enfoque colaborativo e integrado de Derechos Humanos y de la Sustentabilidad, que nos permitan establecer un marco en común y vinculante entre la conservación de los ecosistemas y cuencas con la garantía del derecho humano al agua y medio ambiente sano.”
En la creación de la obra participaron diversos actores en el comité redactor integrado por “representantes del Centro Regional de Capacitación en Cuencas A.C., Ambientalistas del Centro A.C., el Observatorio Ciudadano para la protección Ambiental de Querétaro A.C. y Espacio Creativo Bajo Tierra (Museo del Agua) A.C. Así mismo, está integrado por especialistas en hidrometría, geohidrología, gestión integrada de cuencas, ingeniería hidráulica, derechos humanos, administración pública, biología, ciencias de la tierra, sustentabilidad y gestión ambiental de las facultades de Ciencias Naturales, Ciencias Políticas y Sociales, Ingeniería, Derecho y Filosofía, la Coordinación de Sustentabilidad e Innovación Académica y el Centro de Investigaciones del Agua de la Universidad Autónoma de Querétaro. De igual forma, participaron en la redacción especialistas del Centro de Geociencias de la Universidad Nacional Autónoma de México, del Centro de Investigación en Ciencias de Información Geoespacial, del Centro de Investigación en Ciencias de Información Geoespacial (CentroGeo), de la Iniciativa Internacional de Subsidencia del Terreno de la UNESCO (LASII), de la Iniciativa Internacional sobre Inundaciones del Programa Hidrológico Intergubernamental de la UNESCO, International Flood Initiative (IFI-LAC), y el Programa Hidrológico Intergubernamental.”
El libro “Pautas para la Regulación Hídrica desde los Enfoques de Derechos Humanos y Sustentabilidad”, contempla como principales preocupaciones:
1) Salud de ecosistemas y cuencas,
2) Acceso al agua,
3) Riesgos hidrometeorológicos,
4) Conflictos socioambientales y
5) Gobernanza.
Y al decir del libro, con esta obra se podrá establecer “una radiografía que acompaña el desarrollo de las pautas propuestas…, susceptibles de incluirse en cualquier marco legal sobre gestión integral del agua y territorio con miras a resolver la crisis hídrica, agudizada por el Cambio Climático.”