El presidente de la Cámara Nacional de las Artes Gráficas (CANAGRAF), Roberto Gutiérrez Durán, aseguró que Querétaro, la Ciudad de México y Guadalajara son estados con amplia industria en materia de imprentas para libros, pero también para publicidad política y electoral.
En zonas como San Juan del Río, afirmó, se tienen empresas dedicadas a este rubro, lo que ha posicionado a la entidad entre estos estados protagonistas de la industria de las artes gráficas; además de los avances en materia digital.
Al tomar en cuenta que se viene el proceso electoral de 2024, el empresario refirió que este tipo de movimientos políticos genera una derrama significativa para los miembros de este giro; multiplicando hasta cinco veces el ingreso que perciben. “Esperamos que para este periodo del año que entra va a crecer aún más y se va a tener una derrama importante”, advirtió.
“De los cerca de 200 miembros a nivel nacional que tenemos en la cámara, de estos, dedicados a este tema electoral podría ser un 10, 20 por ciento. Cada periodo es distinto, se van solicitando más cosas; varias empresas se han dedicado a hacer solo cosas electorales”, comentó Roberto Gutiérrez.
Para lograr dar respuesta a las diferentes solicitudes de los partidos políticos, señaló, se ha trabajado en un esquema de networking; donde a través de chats y colaboraciones, los “pedidos” pueden llegar a “sacarse” de manera más eficiente entre varias empresas.
Reconoció que los procesos electorales son complicados, derivado de las actividades en un corto plazo, y las necesidades de cada partido; pues los pedidos de distintos elementos como camisetas, lonas, promocionales y banderines, son los insumos básicos electorales.
“Sin duda, las imprentas trabajan todos los promocionales, y son unos ritmos muy rápidos y muy estresantes, por todo lo que piden: camisetas, lonas, banderines, por miles; y te dan de margen de dos a tres días. Lo que hacen es tener chats para apoyarse con otras empresas para poder responder”, detalló.
Finalmente, Gutiérrez Durán admitió que también es un proceso complicado el que reciban los recursos por este tipo de trabajos; dado que los partidos deben seguir diversos procedimientos para dar cuenta del gasto público que ejercen en materia electoral.
“En las campañas se pide y se pide; y después, al momento del cobro, es complicado; y más cuando el candidato no gana, se complica más”, finalizó.