La estudiante de Ingeniería Biomédica, de la facultad de Ingeniería de la Universidad Autónoma de Querétaro, Arely Salcedo Huitrón, desarrolló un dispositivo que detecta el sedante de uso veterinario xilacina, usado por agresores sexuales en las bebidas alcohólicas.
Lo anterior, como parte del Fondo para el Fomento de la Cultura Emprendedora 2022 de la Facultad de Ingeniería (FI), en la categoría Seguridad Humana. Además, recibió el tercer lugar en la 12° edición de Nuevos Talentos Científicos y Tecnológicos del Consejo de Ciencia y Tecnología del estado de Querétaro.
La alumna de la máxima casa de estudios queretana indicó que su proyecto, en el cual recibe la asesoría del profesor Juan de Dios Galindo de la Rosa, consistirá en un dispositivo pequeño y portátil con láminas de oro y una celda electroquímica que oxida la molécula de xilacina; mismo que se encuentra en fase de desarrollo.
La universitaria señaló que se trata de una especie de vara para introducir en la bebida alcohólica, al que es necesario esperar de 15 a 20 segundos y prende un foco si detecta la presencia de xilacina, a pesar de que haya sido preparada con bebidas azucaradas o gasificadas o alcohol.
Añadió que sería una primera barrera de protección contra uno de los delitos más comunes en México y, en caso de ocurrir, la víctima podría contar con una evidencia para presentar la denuncia pertinente y escale en la condena.
“La xilacina se emplea en animales para provocar efectos somníferos y anestésicos muy leves. Es alarmante lo fácil que se puede conseguir; los agresores la agregan en la bebida, sin ninguna medición, para sedar a la víctima y facilitarles la agresión sexual”.
Además, precisó que la ingesta de xilacina en humanos puede causar depresión de los sistemas nervioso y cardiorrespiratorio, frecuencia cardíaca más lenta de lo normal, hipotensión e incluso la muerte. Puede ingresar al cuerpo por cualquier vía; sin embargo, al ser oral los efectos son más rápidos y directos, manifestó.
“El proyecto nació desde mi visión como mujer, pero cualquier persona está en riesgo; podría desarrollarse aún más para la detección de más drogas y un prototipo físico para ofrecerlo al público en general. Muchas veces nos atrapamos en una burbuja tratando de encontrar el hilo negro, pero realmente los mayores problemas son los que tienes justo enfrente. Me emociona poder llevar una idea que nació en un salón a la práctica social”.