De manera unilateral, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador decretó una “pausa” en las relaciones con España. Ya que el siguiente gobierno las retome, yo no, afirmó.
En su conferencia matutina, al hablar de su propuesta de reforma eléctrica, criticada por la embajada de Estados Unidos, el mandatario acusó a empresarios españoles de vernos como “una colonia, (con) jugosos negocios al amparo del poder y antes eran dueños de México”.
Posteriormente dijo que no elevará el asunto a un tema diplomático, afirmando que solamente se trató de un comentario al calor del tema energético.
Antes había señalado que el negocio de las energías tiene un destacado caso en “las empresas españolas, si ahora no es buena la relación y a mí me gustaría que hasta nos tardaríamos en que se normalizara, para hacer una pausa… “Hacer una pausa en las relaciones porque era un contubernio arriba, una promiscuidad económica, política, en la cúpula de los Gobiernos de México y de España”, delineó.
“Como tres sexenios seguidos y México llevaba la peor parte, nos saqueaban. Entonces, vale más darnos un tiempo, una pausa, a lo mejor ya, cuando cambie el gobierno, ya se restablecen las relaciones. La pausa es vamos a darnos tiempo para respetarnos y que no nos vean como tierra de conquista, o sea, sí queremos tener buenas relaciones con todos los gobiernos, con todos los pueblos del mundo, pero no queremos que nos roben”, subrayó.
“Así como los españoles no quieren que lleguen de ningún país, y hacen bien, a robarles, pues tampoco queremos nosotros, vamos a esperar, porque era mucho”, dijo.