Como parte de la investigación en curso contra GUILLERMO GUTIÉRREZ BADILLO en torno a los sobornos por las reformas estructurales, brincaron en el SAT los montos de las declaraciones anuales del hombre cercano al gobernador. Al parecer hay una discrepancia millonaria en las sumas y restas de El Chespirto, al que algunos quisieran ver exonerado. Pero no es así.
Tan claro como el agua.