En sesión de Pleno de la LXI Legislatura del estado de Querétaro, se aprobaron diversas modificaciones a la Ley Orgánica del congreso, para permitir recibir con mayor puntualidad las minutas de Reformas Constitucionales Federales.
Sin embargo, dicho punto de acuerdo provocó el debate sobre el trabajo de la mesa directiva saliente, encabezada por la diputada Andrea Tovar Saavedra; así como de la labor de la Secretaría de Servicios Parlamentarios.
Por un lado, la crítica a Tovar Saavedra corrió a cargo de Ulises Gómez de la Rosa, de Sinuhé Piedragil Ortiz y de Homero Barrera McDonald, quienes señalaron haber esperado que una mesa encabezada por Morena pudiera dar mayor celeridad a la discusión de los dictámenes federales.
“El interés en un momento de presidir esta mesa directiva por parte de Morena y los compañeros aliados de la Cuarta Transformación justamente era que esta mesa directiva pudiera acceder y facilitar estos temas nacionales que tenían o se tienen en la discusión de las reformas de nuestro proyecto presentado por nuestra presidenta. Lamentablemente, solo pudimos discutir dos temas de esta agenda nacional”, afirmó Piedragil Ortiz.
Por otro lado, Andrea Tovar señaló que existen dos congeladoras: una, ante el trabajo de Servicios Parlamentarios para hacer llegar las iniciativas; y dos, las propias presidencias de las comisiones.
“No puedo permitir que esta tribuna se use para decir calumnias y mentiras. Mucho se ha acusado, se ha dicho y se ha litigado en los medios de comunicación sobre el actuar de la mesa directiva, pero se nos olvida nuevamente que, quien turna las iniciativas es el director de servicios parlamentarios; si bien depende orgánicamente de la presidencia de la mesa directiva, también las y los diputados pueden promover recursos, pueden abrir expedientes en la Contraloría si es que algún funcionario público no hace su trabajo”, argumentó.
En tanto que diputados como Teresita Calzada Rovirosa, de Movimiento Ciudadano y Guillermo Vega Guerrero, del Partido Acción Nacional, defendieron el trabajo de la presidenta saliente.
El dictamen en disputa busca generar un trámite preferente a las minutas de reformas a la Constitución Política de los Estado Unidos Mexicanos, sin que esto implique que se omitan actos del proceso legislativo, pero sí con una atención para su desarrollo, al agilizar el proceso legislativo que actualmente corresponde a ese tipo de asuntos y así participar activamente en las reformas a la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.