Como una oportunidad laboral para los constructores locales y una derrama general a favor de esta industria que crecerá un 10 por ciento junto con su proveduría, empleados y las 64 ramas de la economía en que influye, consideró Óscar Hale Palacios, presidente de la Cámara de la Industria de la Construcción de Querétaro la obra Paseo 5 de Febrero, anunciada este miércoles por el Gobierno de Mauricio Kuri.
Confiado en la participación de las empresas locales afiliadas a la CMIC, indicó que el año anterior cerraron con 13 mil millones de pesos en el valor de la industria de la construcción en Querétaro, lo cual es el 14.4 por ciento del producto interno bruto y que en los próximos dos años verán un considerable aumento.
Dijo Hale Palacios que a nivel nacional se espera un crecimiento del siete por ciento en esta rama, que en realidad estará recuperando lo que dejó de crecer en los tres años anteriores.
“Esta esperanza de crecer un 10 por ciento nos hace ver que tendríamos que estar facturando unos 15 mil millones de pesos a finales de este año. Eso incluye a las constructoras queretanas y foráneas” comentó. Más aún, consideró que “la realidad siempre supera a la política y que esto se ve en la facturación y no solamente como un tema de sobrevivencia de las constructoras sino de crecimiento. Las constructoras se han mantenido estables aunque no se está haciendo el cambio de maquinaria cada cuatro años, como antes”.
Recordó el líder de la CMIC que el gobernador Kuri inició con mil 200 millones de pesos de arranque y que la reactivación ya está, se nota, se siente y lo dicen sus afiliados. Confía en que los constructores queretanos participarán y que todos tienen ya la información sobre la licitación nacional publicada ayer. “La licitación es fuerte por el requerimiento de 62.5 millones de capital contable, sin anticipo, pero hay los medios para crear consorcios y tener vinculación con financieras para generar una buena propuesta”.
Se ve complicada tanto por el sistema de pagos como por la magnitud de la obra, admitió Hale al reconocer que habrá molestias para todos durante la obra y que no es cómodo para una constructora trabajarla.
Comentó que las constructoras que resulten beneficiadas verán que sus horas de mayor beneficio son las madrugadas y los fines de semana, porque además viene la temporada de lluvias y hay muchas instalaciones que pasan por la Avenida 5 de Febrero, incluidas las de fibra óptica, gas, etc. Con todo la parte pluvial, con la que iniciará, será un buen termómetro para lo siguiente.
Finalmente recordó Óscar Hale Palacios que la Avenida 5 de Febrero se hizo hace casi 35 años y esta intervención, con la modificación de la estructura urbana y la movilidad por los puentes y transporte público, nos dará una vialidad con mayor conectividad.